Diez días antes de la definición y con 30 diputados que todavía no fijaron postura, el debate por la legalización del aborto muestra un escenario de virtual empate, en el que cobran especial relevancia las tensiones crecientes dentro del oficialismo, el espacio que cuenta con el mayor número de indecisos.
La paridad se refleja también en las cuatro comisiones
en las que se discute la iniciativa, aunque con una luz de ventaja a favor del
proyecto de legalización, elaborado por la Campaña por el Derecho al Aborto
Legal, Seguro y Gratuito. Con algunos cambios, la iniciativa obtendría dictamen
de mayoría el martes 12, según coincidieron en diálogo con LA NACION referentes
de uno y otro sector.
En cambio, los pronósticos sobre lo que pasará en la
sesión del miércoles 13 resultan dispares. Tanto los promotores de la
reforma como los detractores confían en superar la barrera de los 130 votos, lo
que les garantizaría el triunfo. Con 114 diputados que ya se manifestaron en
contra y 112 que lo hicieron a favor, el resultado depende de los que mantienen
su posición en reserva o no se decidieron.
Los intentos por convencer a los indecisos se intensificaron
durante los últimos días, en especial en el interior del interbloque de Cambiemos ,
que cuenta con 63 diputados que ya anticiparon su voto negativo, 34 que apoyan
el proyecto y 11 que todavía no se pronunciaron. Dentro del bloque de Pro, con
7 indecisos, se desató una pulseada feroz, con jugadas fuertes y acusaciones
cruzadas.
En una suerte de superclásico interno, al frente de los
promotores de la legalización quedó Silvia Lospennato, secretaria parlamentaria
de la bancada. El otro bando lo encabeza Nicolás Massot , jefe del
bloque. Los dos responden políticamente al presidente de la Cámara, Emilio
Monzó . Él es uno de los que no se definió, pero solo votará en caso de
empate.
Para tratar de inclinar la balanza, el sector de Lospennato
organizó para pasado mañana una sesión de fotos en la escalinata del Congreso
con los funcionarios del gobierno nacional y de la Ciudad que respaldan el
proyecto. La iniciativa generó un profundo malestar entre quienes militan en
contra: los acusan de traicionar las reglas acordadas en el seno de Pro.
"Logramos terminar las audiencias con mucho respeto y
sin pelearnos dentro del interbloque Cambiemos. Reinó la cordialidad. Me daría
mucha pena que una foto, que en realidad es una acción partidaria, empañe este
clima. Esto no fue lo convenido en el encuentro nacional del partido", se
quejó la diputada Cornelia Schimdt Liermann (Capital). "Es una falta de
respeto hacia los compañeros de bloque. Usar a figuras nacionales de manera
pública es una suerte de presión sobre aquellos diputados que todavía no
definieron su voto", se quejó otro legislador.
En el sector a favor del proyecto responden que solo es una
forma de contrarrestar el peso de las opiniones en contra vertidas por las
principales figuras del Gobierno: Mauricio Macri , Marcos Peña , María
Eugenia Vidal y Rogelio Frigerio , entre otros. "Nos
inspiran la pluralidad de opiniones y el respeto. Nunca me ofendí con nadie que
se manifestó en contra", explicó uno de los organizadores de la foto.
En ese sector abundan las quejas y los reproches hacia el
otro bando. "Entre quienes votan en contra hay algunos que se fanatizaron
e hicieron lo imposible para impedir que viniera Rubinstein [el ministro de
Salud]", protestó un diputado. "También conseguimos que se respete la
fecha de la sesión, porque algunos querían estirar eternamente el debate para
postergar la sesión hasta iniciado el Mundial . Querían que todo
pasara desapercibido", agregó el mismo diputado.
En el último día de exposiciones pudo verse otra escena de
la batalla dentro del oficialismo. Personal de seguridad desalojó a Fabiana
Túñez, directora del Instituto Nacional de las Mujeres, y Piter Robledo,
subsecretario nacional de Juventud, de la mesa central de la sala, destinada a
diputados y expositores, y los invitó a sentarse en un costado. "¡Es
increíble! Esto lo hace Carmen, porque ellos vinieron a apoyar la
legalización", se enfureció una diputada de Pro, en alusión a Carmen
Polledo, presidenta de la Comisión de Salud y una de las más decididas
detractoras de la legalización.
Además de Monzó, los otros seis macristas indefinidos son
Héctor Stefani (Tierra del Fuego), Hernán Berisso (Buenos Aires), Álvaro
González (Capital), Sofía Brambilla (Corrientes), Sebastián Bragagnolo
(Mendoza) y Facundo Garretón (Tucumán). Los restantes oficialistas indecisos
son de la UCR: Mario Negri (Córdoba), Daniel Kroneberger (La Pampa), Atilio
Benedetti (Entre Ríos) y Hugo Marcucci (Santa Fe).
Con menor intensidad, la pulseada se replica en las bancadas
de la oposición. El segundo en cantidad de indecisos es el interbloque
Argentina Federal. Con 18 votos en contra y 8 a favor, tiene 7 diputados que
todavía no se pronunciaron: Javier David (Salta), Melina Delú (La Pampa),
Danilo Flores (La Rioja), Beder Herrera (La Rioja), Sergio Ziliotto (La Pampa),
Verónica Derna (Misiones) y Flavia Morales (Misiones).
En el interbloque del Frente Renovador hay una mayoría de 13
a 5 en contra del proyecto y solo tres diputados indefinidos: Felipe Solá,
Mirta Tundis y Fernando Asencio, los tres de la provincia de Buenos Aires. De
los bloques mayoritarios, el Frente para la Victoria (FPV) es el único con
mayoría a favor de la iniciativa (52 a 8), mientras mantiene a 5 indefinidos:
los bonaerenses Fernando Espinoza, María Isabel Guerín y Abel Furlán, y los formoseños
Inés Lotto y Gustavo Fernández Patri.
El resto de los indecisos son Mirta Pastoriza (Frente Cívico
por Santiago), Gustavo Saadi (Elijo Catamarca), Luis Contigiani (Partido
Socialista-Santa Fe) y Alejandro Ramos (Primero Argentina-Santa Fe).