Fue la madrugada del adiós. Tras llegar desde Kazán en la noche de ayer, varios jugadores de la selección argentina fueron dejando la concentración del Centro de Entrenamiento de Bronnitsy. Una salida en cuentagotas. Autos de la FIFA llevaron a los futbolistas a los distintos aeropuertos de Moscú para así tomar los vuelos a Inglaterra, España e Italia. Willy Caballero, Cristian Ansaldi, Marcos Rojo, Éver Banega, Lionel Messi , Javier Mascherano, Gonzalo Higuaín, Gabriel Mercado, Eduardo Salvio, Nicolás Otamendi, Franco Armani y Sergio Agüero ya no forman parte de la delegación.

"Nos toca decir adiós de Rusia 2018. Gracias a los aficionados por llenar los estadios de color celeste y blanco y por el esfuerzo que eso conlleva. El equipo lo dio todo hasta el último segundo y murió de pie, con la cabeza bien alta. Gracias compañeros, familia, y a todos los que viajaron a alentar y a los que lo hicieron a más no poder desde su casa", escribió Caballero en su cuenta de Instagram antes de viajar a Londres, donde lo espera su familia. "Nos vamos muy triste por no conseguir el objetivo y el deseo de ganar que todos teníamos. Más allá de todo quiero agradecerles a todo el grupo, a toda la selección por hacerme vivir este sueño", publicó Eduardo Salvio.

El resto de la delegación -que incluye cuerpo técnico, administrativos, médicos, kinesiólogos, cocineros, un grupo de jugadores y sparrings- se irá entre mañana a la noche y el martes a la mañana en un chárter. Ahí partirán Claudio "Chiqui" Tapia y Jorge Sampaoli.

Gonzalo Higuaín viajó a Turín para estar junto a su familia. Su hija Alma nació a fines de mayo, por lo que solo pudo compartir 48 horas con ella antes de sumarse a la concentración. Un caso similar al de Federico Fazio: Tomás nació el 5 de junio, cuando el equipo ya se encontraba concentrado en Barcelona.