Organizaciones de pequeños productores y representantes de la agricultura familiar realizaron un “tractorazo” en el Ministerio de Agroindustria para manifestarse contra el recorte presupuestario en los distintos programas de impulso al sector. La eliminación del monotributo social agropecuario (MSA) definida por el ministro Luis Miguel Etchevehere encabezó la lista de reclamos impulsados por entidades como la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) y la Federación Agraria (FAA).

La cartera agroindustrial decidió cesar sus aportes para el pago del impuesto que reconocía las especificidades del sector y permitía a esas familias acceder a una obra social, percibir jubilaciones así como regularizar su situación laboral. El gobierno dispuso que los quinteros, campesinos y horticultores registrados en el MSA debieran reempadronarse en el monotributo social administrado por el Ministerio de Desarrollo Social. Las organizaciones rechazaron la medida que reduce la cobertura pecuniaria provista desde el Estado e iniciaron un reclamo judicial para intentar garantizar la vigencia del esquema anterior. 

“La eliminación del MSA quita la posibilidad de que el pequeño productor sea reconocido como un sujeto que invierte, produce y comercializa”, expresaron en un comunicado las organizaciones de productores de alimentos encabezadas por la UTT al señalar que la medida “le quita a los pequeños productores el derecho a gozar de obra social y una jubilación, era la única herramienta de regularización del trabajo que el Estado tenía para el sector”.