La profundización del conflicto salarial con los docentes de las universidades nacionales -de paro por tercer semana en rechazo del 15% ofrecido- sumó el respaldo de varios mandatarios, que no solo se solidarizaron con el reclamo sino que algunos hasta se ofrecieron a interceder ante Nación.
Por caso, tras reunirse con autoridades de la Universidad Nacional de Entre Ríos, el gobernador Gustavo Bordet se comprometió a realizar gestiones a nivel nacional para encontrar "puntos de convergencia" y, además, dijo que convocará a los legisladores nacionales entrerrianos.
El gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, respaldó la lucha, en especial la de la Universidad Nacional de Misiones. "La universidad pública está sufriendo mucho en el país", reconoció.
El santafesino Miguel Lifschitz dijo que espera que "el Ministerio de Educación de la Nación lo solucione rápido con una oferta salarial mejor, porque vamos a tener consecuencias muy graves con la pérdida del año de estudio".
También el riojano Sergio Casas se expresó a favor del reclamo de la CONADU: "La educación no es un privilegio, ni un negocio, es un derecho. Hoy más que nunca abrazamos a la UNLaR", enfatizó desde Chile.