Con un 45% menos de turistas argentinos en Brasil, esta
temporada los destinos nacionales toman protagonismo en vacaciones y escapadas. Lo más elegido, lo nuevo y circuitos alternativos junto a los trabajadores del
turismo que los impulsan. Por qué ir, los eventos imperdibles y cómo se vive el
movimiento turístico en los principales destinos de verano del país.
Mar del Plata regresa con todo
La de siempre y la de hoy. De comer en el clásico Viento en popa a sorprenderse con la magia de Sarasanegro o arrancar al mediodía en La cabaña del bosque, la cita obligada a la hora del té que acaba de sumar brunch en manos de la segunda generación del negocio familiar. Año tras año, la perla del Atlántico se reinventa, y 2019 no es la excepción. Con una serie de propuestas que actualizan sus atracciones, La feliz atrae a las familias jóvenes que hace rato no la visitaban y a millennials que no conocieron su época de oro.
A 23 km del centro marplatense, Chapadmalal es el epicentro de esta transformación, con un simpático centrito que alberga la primera cervecería artesanal del pueblo (Las Cuevas) a cargo de emprendedores locales.
"Muchas veces nos quedamos en la línea de la costa, pero hacia adentro, hay estancias para conocer; Chapa es estar cerca de la playa en una zona que también tiene campos y nuevos proyectos que nos invitan a disfrutar de la naturaleza", explica Santiago, responsable de turismo de la bodega Costa y Pampa que con sus visitas guiadas y degustaciones diversificó la propuesta turística del lugar.
"Para LA'PAI el turismo es consecuencia de la identidad de una región y de una cultura, y eso es lo que nos atrae a movilizarnos hacia él. Chapadmalal es una zona con mucha identidad, un lugar donde dos ecosistemas muy importantes se juntan, donde la Sierra de Tandilia se encuentra con el mar. Aquí hay una reserva forestal y un yacimiento paleontológico excepcional, el pueblo se relaciona con su tierra y se desarrollan economías regionales que van creciendo, asociadas a recibir al visitante. En nuestra casa abierta el viajero puede aprender y apreciar todas estas características y obtener información sobre una visita placentera, respetuosa y responsable", detalla Matías.
San Rafael, la ruta del vino alternativa
No todo es malbec y Valle de Uco en la ruta del vino mendocina. En la zona sur de la provincia, San Rafael emerge con enoturismo tope de gama en el terruño donde mejor se expresa la segunda uva más cultivada en el país: bonarda, el tinto alternativo que se viene. Para visitar la bodega que logra un bonarda superior, se puede contratar una visita guiada en Algodon, y tentarse con dormir en un wine lodge entre viñedos con cancha de golf y Chez Gastón, especialidades mendocinas al horno de barro. "Cuando nos visitan, esto es como una escuela, les enseñamos a podar y a clonar las viñas más antiguas en una planta que llevará el nombre del turista", comenta Coco, el ingeniero agrónomo de Algodon Wine Estates.
Alguna noche hay que ir a comer a Al Antojo del cocinero, el
primer restaurante a puertas cerradas de San Rafael: "Queríamos algo que
fuera nuestro y cuando nos casamos elegimos calidad de vida, por eso nos
vinimos a vivir aquí, con una mano atrás y otra adelante. Me enamoré del lugar
y me pareció hermoso para tener chicos. Llevó tiempo que la gente entendiera el
nuevo concepto y esta cocina más elaborada que propuso Nano después de trabajar
con grandes chefs", describe Agustina.
Entre Ríos: termalismo
Bajar un cambio, descansar y mimar el paladar en Federación, un destino termal que además tiene el parque acuático (un boom para los chicos) más grande de la región. La apertura de Arena Resort & Spa reafirma la apuesta de la ciudad del Litoral por esta industria.
Para cenar, Casa Tomada, el espacio moderno que armó un
joven local o Destacados, para probar un pescado de río, el plato típico. Para
la merienda, Tila, el primer deli de la ciudad que abrieron
dos hermanas federaenses vegetarianas. "Ofrecemos pastelería casera,
limonadas, té en hebras y sandwiches gourmet en panes que elaboramos acá, un
menú diferente a lo que se ve en Federación. Con mi hermana teníamos el sueño
de tener un lugar así y cuando apareció este local lo logramos. Hicimos todo
nosotras, a pulmón, recuperamos muebles e incluso exhibimos algunos objetos
antiguos de la Vieja Federación, es importante contar nuestra historia",
relata Sofía.
Nido del águila explota
Mina Clavero es el balneario más joven de esta parte de Córdoba, y Nido del águila, elpoint para zambullirse en agua cristalina y tomar sol en alguna de todas las rocas que encajonan el río.
"Soy guardavidas y hace 9 años que trabajo en este lugar. Soy de acá y gracias al turismo tengo un empleo que me permite prestar este servicio al bañista cada verano junto a tres compañeros. Disfruto mucho de mi trabajo en Nido del águila, que como característica distintiva tiene los saltos de hasta 20 metros desde paredones de granito y una olla limpia con 70 metros para nadar, es una pileta pero natural", detalla José.
Para no perderse: el Festival de jazz Traslasierra en el
Centro Cultural Comechingones, organizado por Analía Sabio con 40 músicos que
convocan a centenas de turistas en una iniciativa que reactiva el comercio
local de Mina Clavero. "El festival va creciendo año tras año, y eso
significa que cada vez vienen más turistas en esos cuatro días, durante los
cuales no solo se puede disfrutar de los conciertos, también de las muestras de
luthiers y de las clínicas de música", expresa la productora.
La Cumbre se afianza por su turismo gastronómico
A 94 km de la ciudad de Córdoba, este rincón de corte británico enamora con casonas de estilo inglés del siglo pasado, grandes parques, anticuarios y un campo de golf único. Desde el corazón del Valle de Punilla, los cerros son protagonistas de un paisaje frondoso que regala aire puro y un estilo de vida en contacto con la naturaleza y el arte.
Estas particularidades de La cumbre motivaron al genial escritor Manuel Mujica Láinez a elegir este territorio para construir su hogar, que hoy es un museo de objetos literarios. Esta es una de las casas pintorescas de las sierras, un conjunto de obras emblemáticas de León Dourge. "Mi papá compró esta propiedad hace 10 años, cuando nosotros nos vinimos a vivir acá le propusimos administrarla y darle continuidad como hospedaje y restaurante, hace dos meses inauguramos la cava para reuniones privadas", comenta Virginia sobre La Fonda de Cruz Chica que armó con Martín.
Al atardecer, hay que dirigirse a Gapasai, un templo para
los practicantes del turismo gastronómico, una experiencia única que por sí
misma ya justifica el viaje a La cumbre: alta cocina de entorno. La novedad en
el restó de Santiago e Inés Blondel es el deck, con una vista impresionante que
se acompaña con una coctelería que también lleva ingredientes autóctonos:
"1000 espinas está hecho con vodka y tuna recogida en el monte, también
usamos suico, una hierba silvestre que crece por todas partes", cuenta
Santiago, que junto con su hermana transformó una casona familiar en el primer
restaurante con menú degustación de la localidad. "Cuando abrimos la gente
nos preguntaba si hacíamos comida de astronautas, pero lo nuestro es
simplemente cocina de autor con técnicas de vanguardia y el objetivo de
utilizar sólo lo que da esta tierra. Evoluciono con lo que hay en el
lugar", explica Santiago mientras acerca a la mesa un ceviche de tararira,
una especie local, con camarones crujientes del mismo río del que proviene la
piedra en la que sirve esta delicia. Los ciclos se reflejan en su menú
conceptual que va de la semilla al fruto, transmitiendo en cada paso un estadio
de la naturaleza y el ambiente serrano. Lo que se viene: cava de quesos y
chacinados.
Verano en Patagonia
Ushuaia es un destino de lujo y de culto, una maravillosa ventana al fin del mundo que durante la estación cálida se disfruta todavía más. Es el momento ideal para adentrarse en el Parque Nacional Tierra del Fuego y sus 40 km de senderos señalizados para descubrir Bahía Lapataia, Laguna Negra y la cascada del Río Pipo. De cervecerías artesanales -Casa Olmos sirve más de 30 variedades en una casa típica fueguina declarada patrimonio cultural- a chocolaterías premium y un circuito imperdible de gastronomía fueguina, la ciudad es puro deleite para el paladar. En Kalma, Jorge Monópoli hace una cocina fueguina investigativa -casi molecular- de kilómetro cero, con productos de cercanía que él mismo busca, como hongos silvestres y algas. El menú degustación es para los viajeros con ansias de probar: "Hay erizos, aparecen algunas espumas, hay unos aires, un gel, y mucho de recolección; el bosque está lleno de hierbas y flores que así como crecen mueren, nadie las usa, no se consumen porque no se conocen. Por eso también tengo el proyecto Cocina Nómada: un ciclo gastronómico de difusión", cuenta el chef. Otro must para probar es el cordero patagónico, que en Oveja Verde se sirve en la parrillada libre. "Ofrecemos almuerzos y alojamiento en un espacio muy familiar, para conversar y para conocer cómo es vivir todo el año acá, más allá del fin del mundo", comenta Federico.
"Hace 11 años que trabajamos en mostrar Tierra del
Fuego desde el aire, somos la única empresa argentina que se dedica
exclusivamente al turismo en helicóptero" expresa Roberto Valdéz.
Innovación y consciencia ecológica son los valores que distinguen a los emprendedores del turismo.