Tanto se relajó Aldosivi con una diferencia mínima, tanto fue Patronato de Paraná en busca de la igualdad, que el empate era casi un hecho. Y llegó a dos minutos del final, con mucho de justicia por cierto,. Dejó al equipo local con un sabor a derrota porque pudo haber sumado tres puntos que necesita como el aire para escaparle al descenso y no supo defender.

Más valiosa aún era la victoria que construía porque enfrentaba a uno de los rivales que también cargan con el desafío de trepar no solo en la tabla de posiciones sino también en las de permanencia en la categoría.

En duelo de necesitados, ninguno fue lo suficientemente ambicioso. El equipo de Gustavo Álvarez asumió la responsabilidad de local y salió a buscar algo más decidido, siempre con ese esquema que presenta tres delanteros que no terminan de hacerse notorios en el resultado.

El gol recién llegó sobre el inicio del complemento, cuando Sebastián Rincón remató tras una muy buena jugada de Gonzalo Verón, uno de los jugadores que más ha rendido a Aldosivi en este torneo. En el camino el balón se desvió y dejó sin chances al arquero Matías Ibáñez.

Pareció cómodo con esa mínima ventaja y el adversario lo advirtió. Y se animó. Así fue que comenzaron los momentos de zozobra en torno al arco defendido por Pocrnjic. Había aroma a igualdad en esa área. Primero con un potente remate de Ávalos que dio en el horizontal. También hubo una jugada muy dudosa que pareció mano y penal para la Miers y penal para la visita. Y sobre el final lo que se veía venir: el gol de Patronato. Nació en un tiro libre en forma de centro pero fuerte, desde la izquierda. Por el segundo palo llegó Tarragona para empujarla a la red.

Con este empate Aldosivi empieza a sufrir. Suma cinco puntos en seis partidos, con apenas una victoria. Patronato regresa satisfecho. Sumó un punto. De visitante, siempre es suficiente para conformar.