Atlético Tucumán le ganó a Patronato de Paraná porque golpeó en momentos claves y sumó su tercera victoria en fila en la Superliga. Fue 2-0, con goles de Fabián Monzón, de tiro libre, en el primer tiempo, y Leandro Díaz, en el quinto minuto de descuento, cuando los visitantes se habían perdido múltiples oportunidades de igualar

Finalmente, en un contraataque, después de sufrir un cabezazo en el travesaño, los tucumanos liquidaron el pleito con los entrerrianos jugados en ataque. Y fue el respiro de los locales, en un encuentro con más eficacia que juego, y la frustración de Patronato, que acumula tres derrotas en serie, no gana desde agosto, cuando derrotó a Independiente por 1-0 por la fecha 5, y se hunde en la zona del descenso.

En el estadio Monumental José Fierro, el conjunto 'decano' consiguió una ajustada victoria, más allá de lo que indicó la chapa definitiva, porque el elenco entrerriano estuvo merodeando la igualdad hasta el tramo final del cotejo.

Atlético Tucumán se anotó un triunfo que le permite acercarse a los puestos de vanguardia (quedó provisoriamente a cinco unidades de los líderes Boca y Argentinos), aunque el rendimiento futbolístico quedó en el 'debe' nuevamente.

Patronato, sobre todo por lo hecho en la segunda mitad, hizo los méritos suficientes como para no irse con las manos vacías, a punto tal que estrelló dos balones en el palo, cuando el local se había retrasado en forma excesiva para defender la ventaja.

El equipo de Zielinski supo pegar justo en la primera parte, cuando jugaba mejor, y luego se dedicó a conservar la diferencia, con el batallador accionar de Erbes y Rojas en la zona central. Pero Atlético no estuvo fino en la definición y desperdició la chance de aumentar en esos 45 minutos iniciales en los que fue ligeramente superior.

En la segunda parte, en tanto, Patronato levantó el nivel, con el simple hecho de adelantarse en el campo, con un Compagnucci que se ofreció como descarga para llegar hasta el fondo y complicar con sus desbordes. Pero al elenco 'rojinegro' le costó traducir ese mejor rendimiento en chances concretas, a excepción de jugadas de pelota parada. Federico Mancinelli y el juvenil José Barreto estrellaron sendos disparos en el travesaño, cuando el arquero Alejandro Sánchez (de buena tarea) ya asomaba vencido. Y en una contra, con el rival completamente 'regalado', Atlético liquidó la historia con una definición cruzada de Leandro Díaz.