Quienes se dedican a la política saben que, además de tomar decisiones de fondo, gobernar significa lanzar los mensajes y gestos adecuados para cada momento. A pocas semanas de la sanción de la ley de emergencia económica, que entre varios otros puntos incluye un aumento significativo de impuestos, al menos 28 gobernadores e intendentes de todo el país tomaron nota del reclamo ciudadano de que la clase política también haga un "esfuerzo" y decidieron congelar su salario por seis meses. Algunos, incluso, fueron más allá y anunciaron que trabajarán ad honorem.

La lista de mandatarios que decidieron dar una señal de austeridad es amplia y, sobre todo, muy heterogénea. Hay gobernadores, pero también intendentes y jefes comunales de municipios pequeños como Eldorado o La Gallareta, pasando por ciudades como Paraná y Córdoba.

Si bien muchos mandatarios pertenecen al amplio espectro del peronismo y están alineados con el presidente Alberto Fernández, también tomaron decisiones en el mismo sentido gobernantes radicales; miembros de Juntos por el Cambio, como los intendentes de San Pedro y de Mar del Plata; referentes del partido que encabeza Roberto Lavagna, Consenso Federal, y hasta representantes del socialismo santafesino, como el intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella.

En la gran mayoría de los casos, el congelamiento -que, con algunas variaciones, se extiende a toda la planta política- regirá por el plazo de 180 días. El único que no estableció un período de vigencia claro y dijo que la medida se extenderá "por el tiempo que dure la emergencia económica" fue el intendente de Paraná, Adán Bahl, cuyo salario es de $86.470.

Oscar Herrera Ahuad (de corbata roja), el gobernador de Misiones, congeló su salario de alrededor de $84.000.Oscar Herrera Ahuad (de corbata roja), el gobernador de Misiones, congeló su salario de alrededor de $84.000.

El gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, es uno de los dos mandatarios provinciales que congelaron su salario. Según detallaron a LA NACION desde su entorno, percibe entre $82.000 y $84.000 (son estimaciones dado que asumió en diciembre y no cobró todavía un mes completo). También congeló sus honorarios el gobernador de Mendoza, el radical Rodolfo Suárez, y detrás de él se plegaron una larga lista de municipios de la provincia: ciudad de Mendoza, Godoy Cruz, Luján de Cuyo, Tupungato y Las Heras, entre otros.

También se sumó a la iniciativa el peronista Omar Perotti, gobernador de Santa Fe, que congeló por decreto los salarios de toda la planta política provincial y argumentó su decisión en "la situación financiera deficitaria" de la provincia. "Resulta imprescindible transitar el camino de la austeridad, guiados por el principio de la solidaridad y promoviendo políticas acordes a la realidad", aseguró.

El intendente de Chivilcoy, el lavagnista Guillermo Britos, anunció que evitará aumentar por el plazo de seis meses su salario actual, de $130.000. También el intendente de Córdoba, Martín Llaryora, y el de la ciudad entrerriana de Concordia, Enrique Cresto.

El intendente del municipio bonaerense de Las Flores, el peronista Alberto Gelené, fue el primero en avanzar un paso más y renunciar a cobrar su salario, de $170.000. Según dijo, vivirá de su jubilación y de algunos otros ingresos por actividades privadas. El también peronista intendente de General Rodríguez, Mauro García, tomó la misma decisión.

Por otro lado, el intendente de General Pueyrredón (municipio que incluye Mar del Plata), Guillermo Montenegro -referente del Pro y exministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad- decidió reducir un 20% su salario, al igual que el el intendente de Berisso, Fabián Cagliardi, del Frente de Todos.

Por otro lado la intendenta de Cañuelas, la peronista Marisa Fassi, anunció que donará el 30% a centros de jubilados, mismo porcentaje que destinará el el intendente de Castelli, Francisco Echarren, a instituciones del municipio. El presidente de la comuna de alrededor de 3000 habitantes La Gallareta, en Santa Fe, también aseguró que costeará con sus ingresos un comedor.

"La actividad política es vocacional, pero no es una actividad de voluntariado. Si fuera así, solo los ricos podrían ejercerla", dijo a LA NACION el analista político Luis Tonelli sobre el reverso de las decisiones de este tipo.

El aluvión de "gestos" comenzó a fines de diciembre, luego de que la oposición presentará un proyecto en ese sentido y los titulares de la Cámara de Diputados y de la Cámara de Senadores - Sergio Massa y Cristina Fernández de Kirchner, respectivamente- dispusieran congelar por 180 días los sueldos y dietas de todos los diputados nacionales y sus asesores políticos.

El radical Rodolfo Suárez, gobernador de Mendoza, congeló su salario y detrás de él se sumaron varios intendentes provincialesEl radical Rodolfo Suárez, gobernador de Mendoza, congeló su salario y detrás de él se sumaron varios intendentes provinciales.

"Es una decisión que se da en el contexto del descrédito de la política en general, y desde un punto de vista, funciona como un boomerang al validar que el político puede prescindir de una parte importante de sus ingresos personales. La desconfianza hace que cualquier salario que cobre cualquier político en la función pública sea considerado una pérdida de dinero", opinó Tonelli.

En términos presupuestarios, el analista consideró que el ahorro "es irrelevante", por lo que se trata fundamentalmente de un "hecho simbólico". "Extrañamente fue propuesto en primer lugar por la oposición legislativa. Tendría que haber sido el gobierno nacional el que, a la par de las medidas de ajuste, tomara la iniciativa", agregó Tonelli.

Por su parte, la socióloga e investigadora del Conicet Ana Natalucci consideró que "siempre que se aducen los gastos de la política se tiende a distorsionar cuál es el problema efectivo, de la crisis argentina, que no es el costo de la política. Dicho esto -agregó- hay una idea de que si el Gobierno está diciendo que estamos en crisis y que hay que ajustar, es razonable que los sectores políticos ajusten de la misma manera que lo hace toda la clase trabajadora", añadió.

Algunos de los dirigentes "austeros"

Gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez

Gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad

Gobernador de Santa Fe, Omar Perotti

Intendente de Carlos Casares, Walter Torchio (Buenos Aires)

Intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos (Buenos Aires)

Intendenta de Cañuelas, Marisa Fassi (Buenos Aires)

Intendente de Salto, Ricardo Alessandro (Buenos Aires)

Intendente de Las Flores, Alberto Gelené (Buenos Aires)

Intendente de Coronel Suárez, Ricardo Moccero (Buenos Aires)

Intendente de San Pedro, Cecilio Salazar (Buenos Aires)

Intendente de General Rodríguez, Mauro García (Buenos Aires)

Intendente de General Pinto, Jorge Zavatarelli (Buenos Aires)

Intendente de Berisso, Fabián Cagliardi (Buenos Aires)

Intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro (Buenos Aires)

Intendente de Coronel Pringles, Lisandro Matzkin (Buenos Aires)

Intendente de Castelli, Francisco Echarren (Buenos Aires)

Intendente de Córdoba, Martín Llaryora (Córdoba)

Intendente de Concordia, Enrique Cresto (Entre Ríos)

Intendente de Paraná, Adán Bahl (Entre Ríos)

Intendente de Luján de Cuyo, Sebastián Bragagnolo (Mendoza)

Intendente de Tupungato, Gustavo Soto (Mendoza)

intendente de Mendoza, Ulpiano Suarez (Mendoza)

Intendente de Las Heras, Daniel Orozco (Mendoza)

Intendente de Godoy Cruz, Tadeo García Zalazar (Mendoza)

Intendente de Eldorado, Fabio Martínez (Misiones)

Presidente de Comuna de La Gallareta, Fernando Nicola (Santa Fe)

Intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella (Santa Fe)

Intendente de Rafaela, Luis Castellano (Santa Fe)