La comisión de Acuerdos del Senado, manejada por la
camporista Anabel Fernández Sagasti, dictaminó ayer los pliegos de 12
embajadores propuestos por el Gobierno que serán votados con comodidad de
mayoría kirchnerista mañana, en el recinto de la Cámara alta. A pesar de un
trámite correcto, la designación de Sergio Urribarri en Israel fue criticada
por entrerrianos macristas, pero quien se llevó la peor parte y el rechazo
anticipado del principal bloque opositor fue Carlos Raimundi (Organización de
los Estados Americanos), por sus dichos sobre Venezuela.
Con mayor calma y guiños del macrismo avanzaron Jorge
Argüello (Estados Unidos) y Daniel Scioli (Brasil). También tuvieron luz verde
Carlos Tomada (México), Carlos “Chacho” Álvarez (Perú), Alberto Iribarne
(Uruguay). Rodolfo Gil (Portugal), Alfredo Atanasof (Bulgaria), Domingo Peppo
(Paraguay), Fernando “Pino” Solanas (Unesco) y Mariano Kestelboim (Asociación
Latinoamericana de Integración-ALADI).
Rechazo opositor
Ante la consulta del jefe de Cambiemos en el Senado, el
radical Luis Naidenoff (Formosa), Raimundi llegó a comparar la crisis que
generó en los últimos años el régimen chavista-madurista con la situación en
Chile.
El designado embajador por Alberto Fernández aseguró que “la Argentina no está entre los países que reconocen a -Juan- Guaidó como presidente de Venezuela”, y agregó: “Al presidente de un país lo tiene que designar legítimamente el pueblo”.
Como si fuera poco, Raimundi señaló que “no va a reconocer
como presidente de un país soberano a alguien que fue reconocido por otros
estados pero no por ese país que dice representar”, y se pronunció a favor de
“la no injerencia externa”.
“Hubo improvisación de parte de un embajador propuesto por
el Poder Ejecutivo, la verdad que no estaba preparado para este tipo de
preguntas, eso desnuda improvisación”, sostuvo Naidenoff sobre Raimundi.
El radical también dijo que el candidato a embajador incurrió “en contradicciones complejas” respecto a Guaidó. Con respecto a este punto, expresó: “El gobierno tiene la decisión y así lo ha hecho saber de no reconocer a Juan Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional y del pueblo venezolano y, por lo tanto, hay un acompañamiento expreso del Gobierno a la dictadura de -Nicolás- Maduro y el no reconocimiento de que en Venezuela se vive situación acuciante en materia de derechos humanos muy grave”.
Observaciones
Durante el tratamiento del pliego de Urribarri, los senadores entrerrianos del macrismo Alfredo de Angeli y Stella Maris Olalla mencionaron las impugnaciones que el exgobernador de dicha provincia recibió por estar afectado a una causa judicial en su contra por un supuesto manejo irregular de fondos. El candidato ratificó que estaría a disposición de la Justicia las veces en que sea requerido para probar su inocencia. La oposición no lo rechazó como a Raimundi, pero mañana no lo votaría en el recinto.
En defensa de Urribarri apareció el jefe del Frente de Todos en la Cámara alta, José Mayans, quien manifestó que “no existe impedimento alguno para que vaya como embajador” y advirtió que “acá hubo presidentes que asumieron procesados”.
GuiñosArgüello resaltó la actitud de Donald Trump durante la
presentación de su carta credencial para desempeñarse en ese país e indicó: “Mantuvimos
un diálogo breve pero me fui con una sensación de que es buena la disposición
en general para escuchar cuál es la situación de Argentina y para colaborar
para la solución de nuestros problemas”. En ese contexto, el diplomático
recordó que durante su estadía, entre 2011 y 2013, tuvo “días complicados” por
un “permanente acoso debido a una acción muy orquestada de los fondos buitres
cuyo objetivo era debilitar las posibilidades de negociaciones” por la deuda
que en ese entonces no pudo solucionar el cristinismo.
Al retirarse de la reunión, Argüello informó ante los
acreditados en el Congreso que ya comenzó a trabajar para gestionar un
encuentro entre el presidente Trump y Alberto Fernández y no descartó que pueda
concretarse este año.
Por su parte, Scioli deslizó ante la comisión que observa “buena disposición” de todos los sectores “para dejar atrás la pirotecnia verbal” entre ambos países, y que tiene “una instrucción muy clara del Presidente de volver a encauzar el vínculo para recuperar esos niveles de intercambio comerciales” entre ambos países.