Con la cuarentena que se impuso a fines de marzo por la
pandemia del coronavirus, todas las actividades –excepto las esenciales-
quedaron en pausa. Sobrevino una parálisis general en el sector turístico que
inmediatamente debió trabajar en solucionar los conflictos que generaban la
cancelación de vuelos y las estadías reservadas que no se utilizarían. Luego,
resolver cómo seguir adelante sin turistas moviéndose y sin ingresos.
Con el paso de las semanas, y la posibilidad de pensar en escenarios posibles a futuro, los destinos turísticos –algo que se vio en todo el mundo- se pusieron a trabajar en el día después. Aun sin tener fechas ciertas, lo importante, se empezaron a plantear en todos lados, es estar preparados.
Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, hay que
mencionar que 11 provincias tuvieron menos de 50 casos positivos de coronavirus
desde el inicio de la pandemia y ya avanzan en organizar una nueva normalidad.
Hay que sumar también a Formosa y Catamarca, donde no se registraron casos.
De hecho, Jujuy ya vivió este fin de semana pasado (desde el
viernes 22 de mayo) su primera experiencia turística con visitantes locales.
Por otro lado, el ministro de Turismo y Deportes de Salta,
Mario Peña, aseguró que la reactivación del turismo interno en esta provincia
-que suele recibir dos millones de turistas por año- tendrá lugar a partir del
1 de junio, si se mantiene sin nuevos casos de coronavirus.
Ayer, martes 26 de mayo, Entre Ríos habilitó el funcionamiento de los servicios de hotelería y gastronomía, el desarrollo de actividades deportivas de no más de dos personas y transporte interurbano dentro de la provincia.
Cataratas del Iguazú
“Ya nos estamos preparando con protocolos de bioseguridad. A
partir de fines de junio podríamos estar recibiendo turismo provincial y
gradualmente ir analizando los receptivos nacionales”, dice Leo Lucas,
presidente del Ente Municipal Iguazú Turismo.
Señala también que los vuelos son fundamentales para
comenzar a activar la oferta turística en su totalidad en un destino lejano
como Iguazú.
Sin embargo, “el turismo por carretera lo creemos totalmente
posible para aquellos viajeros provinciales y regionales, teniendo en cuenta
que Misiones posee rutas maravillosas, rodeadas de paisajes maravillosos que no
harán más que sumar a las experiencias que ya ofrecemos al turista”.
En cuanto a la seguridad dentro del Parque Nacional Iguazú, donde hemos visto multitudes recorriendo las pasarelas en temporada alta, explica que cumplen los requisitos necesarios para adaptarse a los protocolos de bioseguridad.
“Al ser un espacio verde, amplio y al aire libre la posible propagación del virus tiende a ser muy baja. Seguramente estos protocolos se concentraran en limitar la cantidad de visitas diarias, distanciamiento social, evitar aglomeraciones en estaciones y miradores, reservas previas para visitas, requiriendo mucha colaboración de las agencias de viajes y guías de turismo en la organización de la experiencia”, dice Lucas.
Ushuaia
Otro destino donde los vuelos son imprescindibles es
Ushuaia, Tierra del Fuego. Para dar cuenta de la caída de la actividad, en
marzo de 2019 el nivel de ocupación fue del 75%. En marzo 2020, la cifra ya
había caído: 18%. Para abril, con la cuarentena instalada y las fronteras
cerradas, la ocupación fue inexistente.
“Por su característica insular, nuestra provincia es aero-dependiente y seguramente la ciudad de Ushuaia sea la que reciba los primeros vuelos turísticos que se habiliten. La reactivación sin vuelos para la Isla es muy difícil, las distancias son mayores y cruzar por tierra implica el paso por 4 fronteras, que es algo que usualmente hacen los turistas en temporadas cálidas, en general de octubre a marzo”, dice Marcelo Lietti, presidente de la Confederación Agencia de Desarrollo Ushuaia.
“Es probable que el 15 de julio tengamos una apertura de los
centros invernales”, agrega.
Otro rubro fuerte la ciudad austral es el turismo de
cruceros, que suelen comenzar a arribar en octubre.Habrá que ver cuándo vuelven
a navegar estos gigantes del mar y qué protocolos se aplican. El sector sufrió
mucho cuando los barcos comenzaron a quedar varados o sin puertos que los
dejaran amarrar teniendo casos de Covid-19. Y a eso se sumó el problema de las
tripulaciones atrapadas en los barcos sin poder volver a sus casas y confinados
en sus camarotes para evitar los contagios
“Dependerá de la reapertura de fronteras, pero creemos que
es un escenario probable y esperamos que nuestra próxima temporada de verano
nos encuentre con un nuevo mix de turistas. Los extranjeros, que como todos los
años nos visitan en cruceros, y el turismo nacional que apostarán al destino
como una alternativa familiar y con muchas opciones al aire libre”, dice
Lietti.
Bariloche
Otro destino patagónico y protagonista tanto del invierno
como del verano es Bariloche. Aquí ya se sabe que los viajes de egresados de
junio, julio y agosto han quedado postergados. Lógicamente, si no hay clases,
es difícil pensar en grupos de chicos paseando por la ciudad.
“Trabajamos para estar preparados. Sea cual fuere el día 1, queremos poder recibir a los turistas, trabajando en el acondicionamiento, preparando el Cerro Catedral. Arrancar el turismo sin vuelos se puede: somos convencidos por estadísticas que el primer turista que reaccione será el regional y va venir en auto”, dice Gastón Burlon, secretario de Turismo de Bariloche.
La Rioja
En la provincia de La Rioja también aseguran estar
trabajando en procesos que les permitan consolidarse como destino seguro.
“A la vez estamos acompañando al sector privado para que
puedan sobrellevar esta situación de la mejor manera posible, con acciones
concretas a través de un fuerte apoyo económico”, dice José Rosa, secretario de
Turismo de La Rioja y agrega: “Nuestra provincia cuenta con una amplia oferta
de turismo activo natural, rural comunitario, enogastronómico, que permite al
turista utilizar medios de transporte terrestre para conocernos. El avión como
medio de transporte es importante, y seguro trabajaremos para que el futuro
nuestra conectividad aérea mejore, pero podemos trabajar con gente que llegue
en autos o micros”.
San Rafael, Mendoza
Todos coinciden en que las fechas de regreso al turismo son
inciertas ya que dependen de decisiones provinciales y nacionales.
“Esto nos da algo tiempo para prepararnos para poder llevar adelante la actividad de una manera segura para nosotros y para los que nos visitan”, dice Jorge Royon, vocero de la Cámara de Turismo de San Rafael, Mendoza. Y destaca dos factores determinantes: la situación económica y el grado de temor que haya en la sociedad respecto del coronavirus.
“Podemos tener los mejores protocolos de seguridad, pero si la gente si siente temerosa de salir, no viajará”, señala.
Este destino duele recibir, en la segunda parte del año,
muchos grupos, especialmente de estudiantes y de adultos mayores.
“Como ahora estar en grupos es un riesgo, seguramente si
comienza a abrirse la actividad sea con grupos reducidos, tal vez de hasta 15
personas, y esto lleva a que se estén planeando estrategias para no tener que
aumentar precios y siga siendo algo accesible.
En este destino crearon un programa llamado “Estamos Listos” dentro del cual analizan cómo generar protocolos aplicables según el servicio que se brinde. El objetivo es acordar certificados entre privados y autoridades.