Una encuesta sobre acceso a los libros y hábitos de lectura
basada en las respuestas de más de siete mil personas en todo el país revela
que en la Argentina crecen los "lectores híbridos" , es decir,
aquellas personas que leen libros tanto en soporte físico como digital . El 62%
de los encuestados se identificó con esta categoría . Un 34% admitió que solo
lee libros en papel y un 4%, exclusivamente libros digitales. Un 11% del total,
además, consume audiolibros. En este aspecto, los resultados indican que la
lectura de libros digitales es mucho más habitual de la que indican los
estudios de mercado, que suelen reducirla a un 5%. No obstante, cabe destacar
que gran parte del consumo de libros digitales se da en forma gratuita (legal o
pirata): los lectores aún están pocos dispuestos a pagar para leer en
streaming.
La encuesta arroja otros resultados reveladores sobre las
formas de lectura y acceso a los libros. La investigación, que se realizó entre
diciembre de 2019 y marzo de este año, antes del decreto presidencial que
estableció el aislamiento social preventivo y obligatorio, no considera la
digitalización forzosa y apresurada de catálogos de varios sellos locales para
satisfacer la demanda de los lectores durante las primeras semanas de la
cuarentena. En diciembre de 2020 se pondrá en marcha la segunda edición de la
encuesta "Cómo leemos".
Cómo leen los que leen
"Fue un trabajo de tres meses de encuestas, provincia
por provincia, con personas de diferentes edades y niveles socioeconómicos, y
obtuvimos arriba de siete mil respuestas", dice Benchimol a LA NACION . Un
53% de los encuestados es de sexo masculino y un 47%, femenino, y las edades
van de los 13 a los 82 años. Del total, un 46% declaró tener educación
terciaria y solo un 3%, educación primaria completa. El mayor porcentaje de
lectores se ubicó en la zona centro del país (provincias de Buenos Aires,
Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe), con un 54%, y el menor (11%), en las
provincias de Cuyo. Un 90% de los participantes de la encuesta declaró ser
lector, y un porcentaje bien alto de ese 90%, "lector bien intenso",
que lee al menos un libro por mes.
Los dos principales argumentos a favor del e-book fueron el precio (es más económico o gratuito) y la portabilidad. Entre las características a mejorar de este formato, los lectores indicaron que no se puede prestar y que no hay demasiada variedad en la oferta. A menor edad, mayor es la valoración y el uso del smartphone como dispositivo de lectura. A mayor edad, se valora más el uso de la computadora.
La mitad de los lectores de libros en ambos formatos declaró que lee antes de dormir, cuando se va de vacaciones, mientras espera que los atiendan y cuando viaja en el transporte público. Respecto de los géneros favoritos, la novela encabeza la lista de preferencias, con un 76% y un 53% en papel y digital, respectivamente. Siguen los cuentos, la ciencia ficción, la historia y los policiales. Los libros científicos y de divulgación científica, así como también los libros de no ficción (salud, arquitectura, economía, derecho) suelen ser los menos elegidos por los lectores en uno y otro formato.
La importancia de las librerías
Una gratificante noticia para el sector es que la mayoría de
los lectores de libros físicos (un 68%) prefiere descubrir qué leer en las
librerías. Un 53% se guía por las recomendaciones de amigos y familiares, y un
39% por pesquisas que realiza en Google, blogs y redes sociales de autores. Un
24% busca en Mercado Libre los precios de referencia y luego va a la librería a
comprar su ejemplar. Con los libros digitales se mantienen esas tendencias, con
la diferencia de que los lectores más jóvenes van a las librerías a enterarse
de las novedades o títulos, y luego los compran por su cuenta vía Internet. Los
mayores de 35 que leen e-books siguen atentos a las recomendaciones de amigos y
familiares y de autores a los que siguen en redes sociales.
"Aunque con la cuarentena haya crecido, la oferta de libros digitales de Argentina es muy baja y los precios son muy elevados -señala Benchimol-. La critica a los precios parece estar tanto en el libro en papel como en el digital y si no se piensa desde el sector un replanteo sobre este tema la situación será critica". En este aspecto se juega la competencia con plataformas como Netflix que, con el pago de unos diez dólares, se tiene acceso a cientos de series y películas. "El lector se pregunta por qué tiene que pagar entonces diez dólares por una sola novela".
Existen plataformas de libros "a la Netflix" en la Argentina, pero aún no son muy conocidas por la mayoría de los lectores. Sin embargo, según la encuesta, muchos estarían dispuestos a pagar por un servicio así: un 32% abonaría un promedio de $335 al mes por un servicio de esa clase, y un 50% de los lectores estaría dispuesto a contratar un "paquete" de lecturas vía streaming si el precio les resulta conveniente.
Antes de lanzar este estudio exploratorio sobre hábitos de
acceso y lectura de libros, el equipo de Proyecto451 hizo un estudio de la Red
para teledirigir las preguntas a los distintos grupos de personas, sin perder
el carácter aleatorio. "Combinamos una serie de técnicas diferentes que
permiten hacerlo -destaca Benchimol-. Logramos una muestra bien representativa
de siete mil personas de los treinta millones de usuarios en toda la Red que
tienen más de trece años". Se estima que el porcentaje de la población
argentina que no tiene cuenta en Facebook e Instagram no es superior al 15%.