CÓRDOBA.- El ajuste fiscal puesto en marcha por el ministro de Economía, Martín Guzmán, preocupa a los gobernadores que siguen demandando fondos a la Casa Rosada porque las recaudaciones provinciales no se recomponen a la velocidad que demandaría el nivel de gasto que afrontan. A diferencia de la Nación, las provincias no tienen márgenes para recortar ayudas sociales como se hizo con el IFE y los ATP y, por el contrario, deben afrontar aguinaldos y refuerzos de ayudas sociales.

Las transferencias discrecionales en lo que va de noviembre suman $20.800 millones, lo que marca una caída del 28% respecto a octubre y del 54% en relación a septiembre. Ya en agosto contra julio había mostrado una baja pero no de la misma intensidad. Los datos son de la consultora Politikon Chaco, cuyo director Alejandro Pegoraro explicó a LA NACION que en diciembre por el pago de aguinaldos y de bonos que algunas provincias analizan, "seguramente se acrecentará el pedido de fondos".

Pese a la baja registrada en este tipo de giros, Buenos Aires sigue siendo la jurisdicción más beneficiada. Del total de transferencias que recibe la provincia que gobierna Axel Kicillof, en promedio el 25% son transferencias no automáticas. Es la única con una participación en esos giros mayor al 20%; sólo otros ocho superan el 10% y el resto no llega a los dos dígitos.

Al 26 de este mes 15 provincias sobre un total de 24 en la Argentina han publicado sus datos de recaudaciones de octubre, respecto de la inflación nacional acumulada de 37,2%, solo dos provincias tuvieron una recaudación propia por encima: Tucumán con 47% y Formosa, 44,4%. El resto no logró superar ese límite y registraron caídas.

El comportamiento de la coparticipación fue el que oxigenó a las finanzas provinciales: entre agosto y setiembre marcó un crecimiento de alrededor del 13% en pesos constantes lo que se fundamenta en la liquidación de Bienes Personales y Ganancias. En noviembre el alza real volverá a moverse en torno del 13,2% y 13,5%. Pegoraro repasa que la dependencia de algunas provincias de la coparticipación va entre el 70% y el 90%; la que encabeza ese ranking es Formosa, que está por encima del 90%. Respecto del crecimiento en octubre de los ingresos propios del distrito gobernador por Gildo Insfrán, el economista indica que "parte de pisos muy bajos; es el primer crecimiento del año, venía con caídas reales y el 2019 ya había sido muy malo".

Desde hace años diciembre es un mes que preocupa a los gobernantes de todos los niveles y por eso las urgencias de los gobernadores que reclaman respuestas concretas sobre con qué ayuda financiera podrán contar desde la Nación. Por ejemplo, piden que se termine de ejecutar el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial que otorga créditos a las administraciones locales a una tasa nominal anual del 0,1%. Todavía hay un remanente a entregar.

Hasta ahora, las que pidieron y recibieron fondos son: Chubut, $10.000 millones; Neuquén, $8000 millones; Tucumán, $6000 millones; Mendoza, $4900 millones; Córdoba, $4800 millones; Río Negro, $2600 millones; Chaco, $2500 millones; Entre Ríos, $3500 millones; Jujuy, $2500 millones; Corrientes, $800 millones; Misiones, $1200 millones; Salta, $100 millones; Santa Cruz, $3000 millones; Santa Fe, $4600 millones, y Tierra del Fuego, $1500 millones. Pegoraro señala que el remanente de ATN a repartir comprometido por Nación con los gobernadores es de $12.000 millones, mientras que del Fondo Fiduciario queda un resto de aproximadamente $45.000 millones.

En ese contexto es que los gobernadores esperan que se apure la entrega de los recursos que quedan ya que faltan apenas unos 30 días hábiles para el cierre del año. Además, insisten en que de cara al 2021 la Nación sigue sin coparticipar el impuesto País (el 30% sobre las compras y gastos en dólares) y tampoco lo hará con la recaudación del impuesto a las grandes fortunas que ya tiene media sanción de Diputados.

Los ministros provinciales entienden que los nuevos planes con los que Nación reemplazará el IFE podrían cubrir en buena medida el dinero que ingresaba por ese sistema y que iba completo a consumo de primera necesidad. Por ejemplo en Chaco el 27,5% de su población recibió IFE; le siguieron Santiago del Estero, con 26,5%; Formosa, con 26,2%; y Corrientes, con 25%.