El gobierno nacional intenta apurar a sus proveedores
principales de vacunas, Rusia y China, con quienes firmó contratos que ya
contemplaban en sus cláusulas problemas de suministro e incumplimiento sin
reproche posible. Al mismo tiempo, apuesta a las vacunas que otros países dejen
de necesitar. Aún falta tiempo para contar con las dosis que el laboratorio
Richmond envasará en el país, como se anunció ayer.
En este contexto y con las vacunas disponibles, ¿cuándo
podría terminar en cada distrito la inmunización de las 14,2 millones de
personas que conforman la población priorizada del país?
Si se sostuviera el ritmo de llegada y aplicación de las
vacunas, las provincias podrían cubrir con la primera dosis a los seis grupos
de riesgo que define el Plan Estratégico de Vacunación entre mediados de mayo y
fines de diciembre.
LAS PROVINCIAS QUE
TERMINARÍAN DE VACUNAR PRIMERO
En función de las dosis diarias aplicadas en promedio
durante la última semana, LA NACION Data estimó cuántos días faltarían para que
se termine de vacunar con una dosis al personal de salud, mayores de 60 años,
población de más de 18 con otras enfermedades, personal de seguridad y fuerzas
armadas, docentes y personal estratégico de los gobiernos.
San Juan sería el distrito que antes completaría la primera
ronda de dosis, a mediados de mayo, de mantenerse la distribución de las
últimas semanas por parte de Nación. Lo siguen Río Negro, San Luis, Chubut y
Santa Cruz.
Los más rezagados en
la proyección, en cambio, son Córdoba, Tierra del Fuego, Chaco, Neuquén y Entre
Ríos. Este ranking varía de acuerdo con el envío de dosis a la provincias y
las actualizaciones de aplicaciones que se van registrando en el Registro
Federal Nominalizado de Vacunación (Nomivac).
Los mayores reciben la primera dosis de la vacuna contra el
Covid-19 con la esperanza de empezar a salir de la pesadilla
El cálculo realizado solo proyecta la primera dosis. ¿Por
qué? Simplemente porque solo en el caso de la Sputnik V la segunda dosis es un
componente distinto, mientras que en las de Sinopharm y Covishield/AstraZeneca
no difiere entre la primera y la segunda. Además, el Consejo Federal de Salud,
que reúne a todos los ministros de Salud del país, optó por aplicar una dosis
para alcanzar a mayor población. Hasta esta semana, con ese criterio, se
aplicaron 4,8 millones de primeras dosis contra 800.000 de segundas dosis.
Por otro lado, dado que cualquier estimación sobre el avance
de la campaña es altamente sensible a la disponibilidad de vacunas y las
aplicaciones, incluir la segunda dosis de acuerdo con los lotes recibidos daría
un resultado por lo menos disparatado a primera vista. Por ejemplo, Córdoba
terminaría de completar el esquema con dos dosis recién en 2051, Buenos Aires
en 2046 y La Pampa en 2024.
Solo Neuquén, San Luis y Tucumán lo podrían hacer este año.
Están entre las que recibieron más vacunas de acuerdo con el criterio que
adoptó el gobierno nacional de asignarlas en función del porcentaje de
población total en lugar de hacerlo por población de riesgo.
Si se comparan las dosis que distribuye Nación y las que
aplica cada provincia, la urgencia de las administraciones para inocular a la
población y la capacidad instalada se evidencian.
Los distritos que se ubican por encima del 90% de vacunas
suministradas son la Ciudad de Buenos Aires, La Pampa, Río Negro, Santa Fe y
San Luis.
LEJOS DEL PLAN
ORIGINAL
El 23 de diciembre, cuando el Ministerio de Salud de la
Nación publicó el Plan Estratégico de Vacunación para Covid-19, lo hizo con los
preparativos contrarreloj ante la llegada del primer embarque de Moscú y una
aprobación en tiempo récord de la Sputnik V. Ese plan, de acuerdo con una investigación
de LA NACION, quedó solo en los papeles ya que, si se hubiesen seguido sin
excepciones las etapas por población de riesgo de aquel cronograma, se podrían
haber logrado mejores resultados con la cantidad de dosis recibidas en estos
tres meses.
Surge de los datos analizados que, desde el inicio de la
vacunación, ningún distrito llegó a cubrir antes de la segunda ola a los dos
grupos con máxima prioridad: personal de la salud y mayores de 60 años. Aún
queda vacunar alrededor de un 10% del personal de salud del país, de acuerdo
con las declaraciones de funcionarios del Ejecutivo nacional esta semana.
Varios factores influyeron, como la anticipación de la
vacunación de docentes por demanda de los gremios, la aprobación de la vacuna
Sinopharm para mayores, el criterio de distribución por habitantes en lugar de
hacerlo por grupos de riesgo y la vacunación por afinidad política más que por
prioridades. Hasta ahora, un 39,4% de la población priorizada recibió la
primera dosis y un 5,7% la segunda.
EVOLUCIÓN DE LA
VACUNACIÓN, DÍA POR DÍA
Días atrás, el Grupo PAIS (Pacto Argentino por la Inclusión
en Salud), integrado por un centenar de profesionales de distintas disciplinas,
pero todos especializados en salud pública, difundieron a través de un
comunicado una serie de propuestas para mejorar la gestión de la vacunación
contra el Covid-19 en nuesto país.
Además de insistir en la necesidad de aumentar las dosis a
recibir, remarcaron la importancia de “establecer una distribucio?n por
criterios de poblacio?n de riesgo y no por indicadores poblacionales
generales”, además de completar la vacunacio?n de cada grupo de riesgo en forma
escalonada y cumplir con los esquemas completos segu?n lo publicado en revistas
cienti?ficas.
En medio de una segunda ola que no da tregua en la Argentina y en un contexto mundial de escasez de vacunas, una administración inteligente y transparente de las dosis parece ser el único camino posible.