Este será el único feriado nacional durante todo el corriente mes y para poder disfrutarlo elaboramos un esquema con algunos de los lugares a los que se puede ir en procura de un poco de descanso reparador, como preludio, además, de lo que podrían ser las vacaciones de invierno, si la pandemia nos deja.

Algunos están al alcance de un recorrido en auto, otros es necesario apelar al avión, dado que son solamente tres días disponibles. Pero en todos los casos, son una opción valedera para “desenchufarnos” por algunas horas.

Esquel

Recostada sobre la Cordillera de los Andes, en pleno Parque Nacional Los Alerces, la ciudad de Esquel –con huellas galesas– está rodeadela de espectaculares paisajes que van de la estepa al bosque patagónico. Algunas de las propuestas en estos escenarios naturales: navegación al alerzal milenario; cabalgatas por valles y cerros; viajes de 18 km hasta la estación Nahuel Pan en el Viejo Expreso Patagónico (más conocida como La Trochita que vuelve a funcionar precisamente el 9 de julio), trekking al pie del glaciar Torrecillas.

Colón

La ciudad entrerriana de Colón ofrece la posibilidad de disfrutar, a caballo, en vehículo o a pie, el imperdible Parque Nacional el Palmar, que protege a la palmera Yatay.

Son 8.500 hectáreas con diferentes recorridos –senderos vehiculares y peatonales–, un sitio histórico, miradores y un centro de visitantes. Colón cuenta una amplia gama de oferta en alojamientos y gastronomía.

Catamarca Verde

A 38 km de la ciudad de San Fernando del Valle de Catamarca se encuentra la hermosa villa turística El Rodeo, fundada en 1614. Emplazada a 1.275 metros sobre el nivel del mar en un terreno ondulado y atravesado por arroyos, antiguamente se la llamó –en quechua– niquixao o “pueblo de niebla” y ese es el nombre de la fiesta principal del pueblo que se realiza el 25 de mayo. Los visitantes disfrutan de buena pesca de trucha arcoiris, cabalgatas y trekking al Cordón Ambato, que alcanza los 1.500 metros de altura.

Merlo

Ubicada al pie de la Sierra de los Comechingones, la villa de Merlo posee un microclima debido a una ionización negativa que purifica el aire. Otra particularidad es su gigantesco reloj solar, diseñado por el artista Pérez Celis. En la cuidad, más allá de la comercial Avenida del Sol, merece una vistita el sensorial Museo del Poeta Antonio Esteban Agüero. Entre los múltiples paseos de aventura a reservas y cascadas, es imperdible el ascenso al filo de la Sierra de los Comechingones: el Mirador del Cóndor, con vista al valle de Conlara, es un sitio fascinante de contemplación, en el que además hay propuestas de aventura: parapente, tirolesa y un altivo puente colgante de un cerro a otro. Se puede llegar en auto, por transporte colectivo o en vuelos de la empresa estatal Lade.

Península Valdés

Puerto Madryn es la ciudad más importante y oficia de capital turística de la península. Junio y julio es temporada de ballenas Franca Austral. También hay excursiones en vehículos todo terreno a los abismales paisajes de la cercana Reserva, con alto en Punta Delgada y su hotel, aunque la excursión imprescindible es la navegación para ver ballenas que se realiza desde Puerto Pirámides.

Traslasierra

Desde la ciudad de Córdoba, se accede a Traslasierra por el bellísimo Camino de las Altas Cumbres. Tres embalses, un imponente cordón montañoso, volcanes, palmares, bosques y ríos hacen de esta región un destino formidable para el descanso en plena naturaleza. Comprende más de 20 localidades turísticas, desde ciudades hasta parajes. Villa Dolores y Mina Clavero son los centros urbanos más destacados, le siguen las localidades de Nono, Villa Cura Brochero, Las Rabonas, Los Hornillos, Villa de las Rosas, Las Tapias, San Javier, Yacanto, Luyaba y La Paz. Traslasierra se destaca por sus propuestas naturistas, sorprendentes museos (como el Rocsen) y buenos servicios hoteleros.

San Martín de los Andes

La encantadora aldea neuquina es el inicio (o el fin, según de donde se venga) de la Ruta de los Siete Lagos, un sendero serpenteante de 110 km que la une con Villa La Angostura y atraviesa los parques nacionales Lanín y Nahuel Huapi con sus lagos cristalinos y paisajes boscosos. Algunas propuestas primaverales, con base en San Martín: caminata por el Cerro Colorado, con vista de la cadena de volcanes de la Cordillera y del lago Lácar; trekking más exigente al Cerro Mallo (casi 2.000 metros), atravesando el bosque andino, mountain bike o cabalgata alrededor de la laguna Rosales, escalada en Cerro Bandurias y canotaje en el lago Lácar.

Valles Calchaquíes

El majestuoso valle rodeado de magníficos cordones montañosos y atravesado por el río Santa María, se extiende por 520 km y comprende paisajes de las provincias de Salta, Tucumán y Catamarca. La región incluye zonas vitivinícolas con bodegas, sitios arqueológicos, lugares históricos, museos interesantes y escenarios de turismo aventura. La imponente Quebrada de las Conchas, con sus curiosas formaciones geológicas, forma parte del valle. Cachi, Cafayate, Tafí del Valle, Santa María, Amaicha del Valle y las Ruinas de Quilmes son los principales puntos del recorrido calchaquí.

Esteros del Iberá

La Reserva Provincial Esteros del Iberá –“aguas que brillan” en guaraní– abarca 1.300.000 hectáreas y constituye el segundo humedal más grande de Latinoamérica, después del Pantanal de Brasil. Además de 1.400 plantas dferentes, alberga 60 especies de mamíferos, 60 tipos de reptiles, 40 de anfibios, 25 clases de mariposas, 1.250 especies de peces y 350 variedades de aves. El sitio más conocido para alojarse y hacer excursiones es Colonia Carlos Pellegrini, donde la fauna está al alcance de la mano. Se recomiendan tres días de estadía para hacer paseos por tierra y agua, diurnos y nocturnos; pesca y avistaje de aves.