En un escenario de incertidumbre electoral y polarización del voto, en la Cámara de Diputados comenzaron las primeras especulaciones sobre cómo quedarán divididas las bancas. Frente al difícil desafío de repetir los votos de 2017 -los que se revalidan esta elección-, Juntos por el Cambio buscará contener dentro del interbloque a los distintos espacios que lleguen al Congreso a través de su lista.

Mientras que el Frente de Todos tiene un solo objetivo: nueve diputados más para conseguir la mayoría propia. Después de un cierre de listas reñido en el PRO, donde Rodríguez Larreta impuso en Ciudad y Provincia a sus candidatos sobre Patricia Bullrich y Jorge Macri, valoran que su lista es “100% amarilla”. Saben que de los que ingresen abajo de Diego Santilli van a ser del partido amarillo y no se van a ir del bloque que lidera Cristian Ritondo.

No pasa lo mismo en la lista del radicalismo bonaerense. De esta provincia renuevan 35 bancas. Al Frente de Todos le pertenecen 17 y a Juntos, 14. Va a depender de los votos que la lista radical consiga el próximo 12 de septiembre, la cantidad de candidatos que estén el 14 de noviembre.

Si la lista perdedora saca hasta el 30% de los votos que reciba Juntos en estas elecciones, le corresponderá los lugares 3°, 8°, 13°, 18°, 23, 28°, 33° y suplente 5°; si saca entre 30 y 40 puntos, 3°, 6°, 9°, 12°, 15° , 18° , 21°, 24°, 27°, 30°, 33° y suplentes 3° , 6° y 9°; si consigue más del 40%, 3°, 4°, 7°, 8° , 11°, 12° , 15°, 16°, 19°, 20°, 23°, 24°, 27° , 28°, 31°, 32°, 35° y suplentes 3° , 4°, 7° y 8°.

Esto es según lo acordado entre los distintos espacios del frente opositor Juntos. La preocupación de un sector de la coalición es que esto va a abrir el juego a nuevos “mini bloques”. “El radicalismo va a tener una reorganización interna muy fuerte después de estas elecciones”, consideran.

Dependiendo de la cantidad de votos que saquen en la primaria, es muy probable que Emilio Monzó y Margarita Stolbizer vuelvan a la Cámara baja. Y en el partido centenario ya dan por descontado que “van a armar la suya”.

Es probable que se asocien con Rogelio Frigerio que entraría por Entre Ríos y con Sebastián García de Luca, que desde que Cambiemos dejó el poder buscó armar un “sub-bloque” PRO en la Cámara baja.

Por otro lado, se espera que tome más protagonismo el espacio de Martín Lousteau dentro de la Cámara Baja. Dyana Tavela va segunda en la lista de Manes y ya dan por descontado que ingresará a la Cámara baja.

Lo mismo Martín Tetaz en la Ciudad que se sumó a la lista por pedido directo del ex ministro de Economía. También renovará su banca Carla Carrizo. Se van a sumar Rodrigo De Loredo por Córdoba, Victoria Tejada por Santa Fe, Marcela Antola por Entre Ríos y Pablo Cervi por Neuquén.

Todos apañados por Lousteau, que en las últimas semanas recorrió estas provincias y le dio el apoyo a estos candidatos. Si bien todavía es un debate prematuro, en este sector se ilusiona con quedarse con la jefatura del bloque. Más teniendo en cuenta que varios históricos del partido centenario dejan la Cámara baja como José Cano, Mario Negri o Luis Pastori.

“El espacio va a crecer, eso seguro. No nos molesta no ser protagónicos en esta campaña. Pero vamos a tener peso en un Congreso que va a ser caliente en lo que le queda de Gobierno a Alberto Fernández”, explicó a PERFIL uno de los armadores políticos de este espacio.

Del centro, adentro

Por fuera de toda especulación política, a los fines prácticos, el Frente de Todos sabe que si consigue los nueve diputados que le faltan, la oposición sólo podrá hacer ruido. Pone en juego 52 bancas y la apuesta para que el 10 de diciembre juren 61 legisladores oficialistas está en la gestión y en coptar los espacios del centro.

Igualmente en los distintos sectores del Frente de Todos coinciden en que es apresurado pensar en el resultado de los comicios por dos motivos: La gran cantidad de indecisos que reflejan las encuestas y el fuerte número de ausentes en las elecciones provinciales que ya sucedieron.

En Corrientes el domingo 29 de agosto faltó a votar un poco más que el 30% del padrón, algo similar sucedió en Jujuy y Misiones. “Hay una gran apatía por un proceso de elección”, explicó a PERFIL Mariel Fornoni, directora de la consultora Managment & Fit.

“Lo vemos en los trabajos cualitativos, a la gente cuando les hablás de campaña te dicen que lo único que hay que hacer es la vacunación. Están muy enojados con la dirigencia política”, agregó.

Un caso testigo para sumar más diputados oficialistas mediante el “espacio del centro” o “la tercera vía” es el de Mendoza. En esta provincia el peronismo está acostumbrado a perder pero este año podría llevarle buenas noticias al Palacio Legislativo.

En la provincia andina se renuevan cinco bancas, tres de Juntos por el Cambio, una del Frente de Todos y otra de Equidad Federal.

“Conseguimos un acuerdo con esa tercera fuerza, que va a jugar para nosotros, y nos abre a un nuevo electorado”, explicaron desde el Frente de Todos a PERFIL.

Si bien admiten por lo bajo que no vencerán al radicalismo en estas elecciones, saben que ganar una banca más, ya es un gran logro. Algo parecido ocurre en Salta, donde de las tres que se renuevan, una es de Juntos por el Cambio, otra del Frente de Todos y otra del Bloque Justicialista.

El titular de este espacio Eduardo “Bali” Bucca ya firmó su pase al oficialismo. Sin esa tercera fuerza anotada, el Frente de Todos espera que el sector vinculado al gobernador Leavy mueva sus fichas para que el Frente de Todos sume un diputado más.