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Agrupaciones políticas, sociales y de derechos humanos participaron en el paseo histórico para pedir "memoria, justicia y verdad", al cumplirse los 30 años de la última dictadura.

La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, se mostró "enojada" por el escándalo en que terminó el acto y confirmó que su agrupación no firmó el documento único.

No estamos de acuerdo con usar políticamente una fecha que para nosotros un dolor enorme", observó la presidenta.

Sin embargo, opinó que se van "muy contentas" con la participación del público en el acto en repudio al golpe militar.

"Estoy enojada con la utilización que se hace del dolor", afirmó y añadió que "es muy difícil consensuar algo", señaló Carlotto y confirmó que no firmaron un documento donde, entre otros puntos, había declaraciones críticas al Gobierno.

Más de 300 organizaciones participaban esta noche en Plaza de Mayo del acto "Treinta años: memoria, justicia, verdad", para recordar a las víctimas del golpe militar y repudiar los hechos de violencia de la última dictadura.

La marcha comenzó en Congreso y tuvo como lema sin "distinciones políticas o ideológicas para decir no a la dictadura y nunca más".

El acto, previsto para las 18, se retrasó a la espera de las Madres de Plaza de Mayo, cuya columna ingresó dificultosamente al paseo histórico.

Las consignas que convocan la manifestación son: "Juicio, castigo y cárcel común, efectiva y perpetua a todos los genocidas"; "Anulación de los indultos" y "Restitución de la identidad a los 500 jóvenes apropiados".

El acto comenzó con la lectura de las consignas. Se nombró luego a cada una de la agrupaciones convocantes y se leyó la Carta Abierta a la dictadura militar escrita por Rodolfo Walsh cuando se cumplió un año del golpe, que denuncia las atrocidades que se cometían.