E
l megarreclamo provincial que se reedita ahora apunta tanto a la Secretaría de Energía nacional como a las petroleras, y se da en el marco de la reciente asunción como titular de esa entidad del gobernador radical Julio Cobos (Mendoza).
La buena sintonía de Cobos con Néstor Kirchner -al punto que se lo menciona como potencial compañero de fórmula del santacruceño en 2007- parece augurar al menos la apertura de una mesa de negociación más fluida entre provincias y Nación. Por lo pronto, ya Cobos gestionó una reunión de los gobernadores petroleros con el ministro de Planificación, Julio De Vido, para apurar la sanción de una ley nacional de hidrocarburos.
Los dos conflictos fundamentales en materia de recursos adeudados giran en torno del precio «ficticio» del petróleo en función del cual se liquidaron las regalías durante cerca de 15 meses (desde 2003, a partir de una resolución nacional), y al impacto que sobre ese cálculo tienen hoy las retenciones a las exportaciones del petróleo, que rigen desde 2002.
El monto de lo adeudado, según las provincias, es varias veces millonario, y difiere ostensiblemente según la fuente consultada.
Según cálculos que maneja uno de los distritos afectados, ocho provincias perderían este año $ 2.400 millones en regalías petroleras, a raíz de la decisión del gobierno nacional de subsidiar el precio del combustible en todo el país. En tanto, desde Neuquén aseguran que la provincia resignó ya cerca de $ 3.000 millones (si se suman además las regalías por el gas).
Si bien no se trata de planteos nuevos, volvieron a cobrar fuerza tras la virtual reactivación de la OFEPHI y por el especial momento que atraviesan las provincias productoras, hoy embarcadas en distintas licitaciones para activar nuevos procesos de exploración y, eventualmente, de explotación de hidrocarburos.
Para analizar este y otros temas, la entidad volvió a reunirse días atrás en Buenos Aires, con la presencia de funcionarios del sector de varias de las 10 provincias que la integran. Mendoza aportó además a su fiscal de Estado, Pedro Sin.
Balance
Allí acordaron mantener un nuevo encuentro próximamente, con un balance detallado de los números de las pérdidas en la mano. «La solución debe pasar por un acuerdo tanto con el gobierno nacional como con las empresas», explicó un funcionario provincial. No fue de la partida Neuquén (ver aparte). «Tiene una forma particular de trabajar, y planteos propios», justificó la fuente.
Parte de la deuda tuvo origen en 2003, cuando las empresas productoras consensuaron un acuerdo de estabilización de precios de los combustibles con Nación. Allí las petroleras se comprometieron a liquidar las regalías a partir del cálculo del precio del barril de crudo a u$s 28,50, aunque la cotización internacional fuese superior.
Ese convenio se instrumentó vía la Resolución 85 de la Secretaría de Energía de la Nación. «Allí se estableció un crédito acumulativo a favor de las productoras, y éstas a su vez con las provincias, que las refinadoras comenzarían a devolver cuando el crudo cotizara por debajo del precio acordado», recordó un funcionario provincial.
Sin embargo, el precio del barril nunca detuvo su franco ascenso. «Eso hizo caer el acuerdo de pago de la proporción de las regalías no percibidas», advirtió la fuente provincial.
Hoy esa resolución ya no rige para el cálculo de regalías. «Se dejó de aplicar, pero nunca se derogó», explicó otro hombre del interior a este diario, por lo cual ahora la OFEPHI bregará por ponerle un punto final institucional a la norma, con el consecuente cobro de lo adeudado a las provincias. (Ambito)
