Jueves 28 de diciembre de 2006
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Policiales
Procesados por torturas y mutilaciones serán excarcelados
La Sala I dispuso que dos acusados de graves lesiones esperen el juicio oral fuera de la cárcel.

L

a Sala I de la Cámara del Crimen dispuso otorgar la libertad de dos personas que se encontraban detenidas y procesadas por haber producido graves mutilaciones y torturas a un joven en Paraná. La medida quedará efectiva una vez que los acusados logren afrontar la fianza que seguramente se le impondrá desde la Justicia de Instrucción. El abogado de Diego González y Damián Palacios apeló ante la Sala I la resolución que fijaba su prisión preventiva luego de que el juez de Instrucción Ricardo González dispusiera procesarlos por cortarle dedos de una mano e intentar seccionarle la lengua a Mario Colissini, de 18 años. El hecho aconteció la noche del 8 de octubre en una vivienda de O’ Higgins y Godoy de Paraná. Allí Colissini fue sometido a todo tipo de torturas y lesiones. Sin embargo Felipe Celli, Jorge García y Hugo Perotti dispusieron continuar con el procesamiento, pero revocando la prisión preventiva. De este modo Diego Ramón Alejandro González, de 23 años, más conocido como Pastrana, y Damián Andrés Palacios, de 19, apodado Data, siempre y cuando cumplan con la fianza podrán esperar el juicio oral y público en libertad. En la etapa de instrucción los dos fueron encontrados responsables de los delitos de Torturas y robo calificado por el uso de arma de fuego. Los camaristas avalaron la resolución en un fallo que sentó un precedente por parte del Superior Tribunal de Justicia (STJ). Los vocales impusieron la jurisprudencia en la causa denominada Delfín y en la misma los integrantes del STJ alertan que cualquier ciudadano es considerado inocente hasta tanto no reciban una condena que quede en firme. La resolución del alto cuerpo generó varios cruces de opiniones que determinaron que procesados por homicidio y hasta violaciones hayan recobrado la libertad a la espera del juicio oral y público. De alguna manera, el fallo del STJ echó por tierra cualquier interpretación sobre la supuesta peligrosidad de los procesados y con la resolución se buscó preservar el derecho constitucional que manda que alguien es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Se recalcó que Entre Ríos es una de las pocas provincias donde se mantiene a rajatabla el precepto constitucional de aplicar la condena y cárcel a alguien cuando exista un fallo judicial y no antes. En el fallo de la Cámara al menos se da la alternativa que si los procesados no cumplen con el pago de la fianza deberán permanecer detenidos en la cárcel de Paraná. Pero además, se les fijó, en caso de obtener la libertad transitoria, una serie de exigencias y controles tales como no amedrentar a la víctima, no salir de noche, no consumir bebidas alcohólicas u otras drogas y estar permanentemente a disposición de la Justicia. Si los procesados violan tales restricciones perderán inmediatamente el beneficio de la excarcelación. Violenta historia Colissini fue internado en grave estado en el hospital San Martín luego de que una patrulla policial lo encontrara inconsciente en la calle tras haber sufrido una paliza y torturas de todo tipo. Los médicos lo asistieron por la gravedad de las lesiones, en especial la amputación que presentaba de varias falanges de los dedos de la mano derecha. En la resolución de la Justicia de Instrucción se destacó que la víctima fue sorprendida mientras descansaba en una casa que se encuentra dentro del terreno en que vive uno de los acusados. Los procesados le cuestionaron a Colissini el haberlos relacionado y “buchoneado” en la Policía con un robo acontecido en la zona. Producto de esto, los acusados decidieron golpearlo y someterlo a todo tipo de torturas. “González, con un machete de unos 80 centímetros, lo cortó en 12 partes de la humanidad, en tanto que Palacios lo intimidaba con un arma de fuego”, se relató para indicar: “Con posterioridad a la paliza, González tomó una pinza plateada y un cuchillo de mesa con escaso filo y obligó a la víctima a abrir la boca. Con la pinza tomó la punta de la lengua y pretendió cortársela con el cuchillo, pero no pudo lograr su objetivo”. Sin embargo continuó y “le tomó la mano derecha y le amputó con el machete las primeras falanges de tres dedos”. “Acto seguido obligaron a Colissini a cambiarse la ropa y retirarse del lugar amenazándolo de muerte”, se referenció. El informe médico destacó que la víctima sufrió 12 heridas: tres cortantes en el cuero cabelludo, una superficial en la cara externa del muslo derecho, un corte en la región occipital, otro en la región dorsal del antebrazo izquierdo, otro en la región palmar del anular y meñique izquierdo, además de una herida en el tercio distal del antebrazo derecho. También se estableció que lo golpearon en varias partes del cuerpo con un bate de sóftbol. En el auto de procesamiento, se indicó que “las falanges amputadas fueron secuestradas porque la víctima las llevó en el bolsillo de su pantalón y se las entregó al personal policial”. (Fuente: Uno)
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