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��Si la legalidad nos permite, vamos a generar una playa agreste con un perfil distinto al del Complejo Playas del Thompson, que tiene paradores y demás cosas. Los Arenales será de entrada libre y gratuita”. El secretario de Turismo de la Municipalidad de Paraná, Carlos Monti, confirmó a EL DIARIO lo que el subsecretario de Planificación Municipal, Gastón Grand, había adelantado quince días antes. Con la idea de sumar una playa más a Paraná -que sólo tiene el Municipal y el Thompson-, la Comuna proyecta reeditar la de Los Arenales en una parte del terreno en el que funcionó el balneario hasta mediados de los años ‘90. Se tratará de un “producto distinto”, una playa “rústica” y “agreste”, donde el visitante pueda disfrutar de un paisaje y condiciones diferentes (sin cantinas ni baños por ahora). Esto, siempre y cuando se logre un “acuerdo” entre la Municipalidad y el empresario que tiene los terrenos y que comenzó a construir un barrio privado en él. En julio pasado, Grand había anticipado que la Comuna planeaba recuperar la franja de terreno público sobre el borde costero frente al barrio privado Amarras del Sol, con el fin de crear una playa pública. Para eso se iniciarían gestiones con el fin de “llegar a un acuerdo con los dueños de Amarras del Sol. La intención es poder tener un acceso a todo el frente fluvial y recuperar para el uso público todo el ex balneario Los Arenales, lo que permitiría volver a contar con playas de uso público y a su vez mantener el emprendimiento residencial, conservando las inversiones en el sector”, dijo en esa oportunidad Grand. Además, opinó que para el empresario el hecho de que el frente costero quede en manos de la Comuna, “no es algo que resulte de su agrado, pero está dispuesto a ceder en el marco de una negociación que termine en una situación que le permita viabilizar su emprendimiento, ponerlo en orden y comercializarlo”. Una recorrida por los terrenos que están en litigio permitió ver que la construcción del barrio privado Amarras del Sol está frenada: hay yuyos y malezas por doquier, y ningún movimiento relacionado a edificación. Los límites de algunos lotes aún pueden ser distinguidos, y se ve que en cada uno está hecha la instalación eléctrica. Las calles tienen cordón cuneta y un afirmado de piedra; además cuentan con coquetas columnas de luz pintadas de negro. En cuanto a lo que serían las amarras, está avanzada la estructura que linda con la entrada del río. Grand explicó que “se está avanzando en las negociaciones con las distintas partes. Entre las partes involucradas está la Provincia, que a su vez tiene problemas con algunos actores particulares que le han iniciado juicio. Por lo tanto, es una madeja bastante compleja que se ha venido gestionando bien y probablemente en los próximos días tengamos noticias positivas”. (Fuente: El Diario)