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ersión municipal Los hundimientos que se observan desde diciembre último en un tramo de la remozada Avenida Costanera, en el sector que va de Juan de San Martín hasta Vélez Sarsfield, no obedecen a falta de mantenimiento de la obra sino a “fallas” del proyecto original, desarrollado por una unión transitoria de empresas (UTE) conformada por Dragados y Construcciones Portuarias SA y JCR, bajo la inspección de la Unidad Ejecutora Provincial (UEP), según un informe oficial. “Los pequeños descensos superficiales del solado articulado y la falta de tratamiento de juntas a lo largo de la obra obedecen a fallas de proyecto, y no de mantenimiento, (que) si bien no afectan en gran medida la estabilidad de la obra, sí acarrean pequeños efectos estéticos y a la vez de transitabilidad peatonal”, sostiene el informe técnico elaborado por la Municipalidad de Paraná, con las firmas de los ingenieros Omar Ramos, director de Obras Viales e Hidráulicas, y Raúl Guzmán, titular de Obras Sanitarias, y del arquitecto Juan Ramón Martínez, director de Arquitectura. El escrito subraya que si bien “existe una responsabilidad civil de la empresa constructora que ejecutó la obra, por diez años, los trabajos de reparación serán encarados por la Municipalidad de Paraná en razón de la urgencia y uso de este espacio público”. De ese modo, respondió las afirmaciones del titular de la UEP, Martín Fabre, que en diciembre último había cargado contra la falta de mantenimiento de la obra por parte de la Comuna. De acuerdo al dossier elaborado por la administración del intendente Julio Solanas, los hundimientos afectan a un sector de unos 50 metros cuadrados donde se observó “un importante deslizamiento con pérdida o arrastre de suelo común tipo arcilloso en el sector circundante a un cantero” debajo del pavimento articulado. Ese deslizamiento “provocó el corrimiento de la cobertura de piedras (gaviones) que se ubican como elemento estructural de protección de margen (pedraplén)”. Pero esos inconvenientes obedecen a causas estructurales, añade, ya que no se constató “la presencia de ningún caño roto, tanto de desagüe como de abastecimiento de agua potable”. Y añade: “Salvo el sector apuntado, toda la obra de protección de margen, que se lleva adelante a través de un pedraplén o cobertura con gaviones de piedra de origen basáltico, no presenta ningún tipo de deformaciones y las condiciones son estables sin corrimientos visibles”. En ese marco, la Municipalidad se propuso realizar una serie de tareas como la extracción del solado articulado, la demolición del contrapiso del solado descalzado, la prolongación de la viga de cierre de hormigón armado, la colocación de una manta de geotextil a fin de impedir la fuga de material fino de relleno, la ampliación de las bocas de captación de los sumideros y un monitoreo permanente de la zona. Versión provincial El titular de la Unidad Ejecutora Provincial (UEP), Martín Fabre, sostuvo hoy que del informe técnico elaborado por la Municipalidad sobre los problemas detectados en la obra de la Costanera de Paraná “no se desprende de ningún modo que sean producto de fallas estructurales o de proyecto, sino que se deben a falta de mantenimiento”. Además, el funcionario calificó de “irracional” la decisión del Municipio de permitir la circulación de tránsito pesado en la Costanera , al advertir que “las consecuencias serán nefastas para la obra y para la barrancas, porque se originarán micro - sismos”. Acerca del informe hecho público por funcionarios de la Municipalidad , Fabre consideró oportuno aclarar que “no hay elemento alguno en ese escrito a través del cual se pueda concluir que en la obra hay fallas estructurales”, dando cuenta que “los funcionarios municipales se limitan a considerar que las fallas y hundimientos observados tuvieron su origen en la presencia de agua que ingresó por el cantero que aloja una palmera, al tiempo que admiten que en diciembre de 2006 se registraron lluvias extraordinarias”. Dicho esto, el funcionario afirmó, además, que “tampoco se demuestra que exista un vicio de construcción”, razón por la cual le solicitó al intendente Julio Solanas, mediante una nota que le remita “los informes, estudios y verificaciones técnicas existentes en su poder que demuestren realmente la existencia de responsabilidad civil por parte de la empresa contratista que ejecutó la obra con el objeto de poder intervenir con las acciones que correspondan”. En este sentido, Fabre hace referencia a “los informes producidos por la SubUnidad Provincial de Coordinación para la Emergencia (Supce)” en los cuales “se desprende que los daños surgidos en la Costanera responden a que el control y el mantenimiento de la obra no fueron debidamente realizados y con la frecuencia indicada oportunamente”. En este marco, el titular de la UEP consideró oportuno recordarle a las autoridades municipales que “mantener una obra de estas características no es mantener una plaza o un parque”, sino que “incumbe al funcionamiento de la obra en sí, es decir al mantenimiento y control de todo el paquete estructural ejecutado, es decir, el confinamiento de la arena, el cuidado y reposición de piezas, entre otras tareas”. Acto seguido, resaltó que “esto no es una novedad para el intendente, ya que recibió un manual operativo cuando se le transfirió la obra al municipio”. Por ello, el funcionario hizo notar que “lo que está sucediendo hoy en la costanera de Paraná es por falta de mantenimiento de la obra”, antes de dar cuenta que hace tal afirmación en “la evidencia que refleja la propia prensa sobre el deterioro y el desmoronamiento de las barrancas, como así también la basura acumulada y el abandono del propio Parque Urquiza”. Párrafo aparte le dedicó Fabre al articulado de la obra, acerca del cual los funcionarios municipales hablan de “juntas”. Al respecto, les informó que el articulado “no lleva sellado de juntas, de lo contrario no sería articulado sino rígido”. Precisamente, se construyó de esa manera para que se absorban las deformaciones y pueda ser reparado fácilmente retirando el bloque y reponiendo el material, siempre en el marco de un permanente monitoreo. El titular de la UEP resaltó, además, que los sumideros “tampoco demuestran mantenimiento de ningún tipo”. El titular de la UEP apeló al mismo documento del municipio en el que se indica que “los pequeños descensos superficiales del solado articulado y la falta de tratamiento de juntas, a lo largo de la obra obedecen a la falla del proyecto, y de mantenimiento, si bien no afectan en gran medida la estabilidad de la obra, si acarrean pequeños efectos estéticos y a la vez de transitabilidad peatonal”. En este punto, aclaró que “en ningún momento se justifica técnicamente tal aseveración”, e inclusive se habla de “pequeños efectos estéticos”, razón por la cual “el informe carece de la fundamentación que nos permita iniciar algún tipo de acción”. Tránsito pesado en la Costanera Párrafo aparte dedicó el funcionario a la novedad que dio a conocer la comuna sobre permitir el tránsito pesado en Costanera: “Se van a ocasionar micro – sismos en los cruces del tránsito pesado sobre los mandapeatones o badenes”, advirtió, al tiempo que aclaró que “la obra no está contemplada para la circulación de tránsito pesado”. Tras destacar la “gravedad” de tal decisión, Fabre aseguró que “esta medida demuestra la falta de conciencia y de conocimientos técnicos de profesionales de la municipalidad que no pueden decirle al intendente que para solucionar el tema del tránsito en Paraná utilicen la Costanera ”. (Fuente: Comunicados de Prensa)