E

l ministro del Interior, Aníbal Fernández, calificó de “mafiosos” y “forajidos” a los trabajadores del Indec que amenazaron con difundir la cifra “real” de la inflación y advirtió que al presidente Néstor Kirchner “no lo aprietan ni las mafias ni las bandas de forajidos” porque “es honesto”. Negó, además, la posibilidad de que se puedan manipular los índices económicos que difunde el organismo por razones prácticas. “¿Qué es esto, una mafia, una banda de forajidos que le van a decir al Presidente lo que tiene que hacer, que supone o pone en duda la honestidad del Presidente?”, cuestionó Fernández. Es que, tras el alejamiento de la funcionaria del Indec encargada de medir el Indice de Precios al Consumidor (IPC), se puso en duda la veracidad de las cifras que difunde el Gobierno. Si bien la ministra de Economía, Felisa Miceli, justificó que el alejamiento de Graciela Bevacqua se trató de un cambio funcional, los trabajadores del organismo lo adjudicaron a la negativa de la funcionaria de modificar los datos para que las cifras finales sean acordes con las expectativas del Gobierno. “El índice (de costo de vida) no es subjetivo. Por el contrario, es altamente objetivo. No hay tutía, lo que es, es”, expresó el ministro en diálogo con Radio América. Según Fernández, “el Gobierno decidió un recambio de un funcionario de cuarta línea designada a dedo y no por concurso”. “Se está reemplazando un funcionario puesto a dedo por otro que se entiende que puede cumplir las funciones de mejor manera, sin descalificar al otro funcionario”, aclaró el ministro al tiempo que señaló que “en este Gobierno se han realizado muchísimos concursos y esto pone de manifiesto su honestidad”. En cuanto a los motivos que dieron los trabajadores respecto de este alejamiento, Fernández manifestó que le preocupa “que se diga que tras los cambios pierde credibilidad el organismo y también que se diga que el Gobierno manipula los datos”.