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os familias del barrio Giachino unida por lazos familiares y que vivían en una vivienda precaria sobre las barrancas del Antoñico, son las dos primeras en ser evacuadas en la capital provincial, a raíz de la crecida del río Paraná. Es que el mayor caudal de agua sobre la costa dificulta el desagüe de los arroyos urbanos, provocando un reflujo que hace que en el sector urbano, haya tramos con niveles superiores a los habituales. Eso es lo que ocurrió con las familias González y Barlasina, que sufrieron el derrumbe de sus precarias viviendas el viernes pasado. Las autoridades de Defensa Civil decidieron trasladar a los afectados hasta la sala Mayo de Puerto Nuevo, donde permanecieron hasta el domingo. Ayer, en horas de la mañana, fueron reubicados en la Toma Vieja; mientras tanto, la Municipalidad está construyendo una vivienda en la zona de avenida Zanni al final. Son Stella González (42 años) y sus cinco hijos: Barlasina Diego (25), Daniel (21), Sandro (15), Andrea (14) y Eva (11), además de sus nietas Aldana (4) y Brisa (2), junto a su nuera Carina Cáceres, casada con Diego. Relataron a UNO que habitaban barrio Giachino –en terrenos debajo de las escuelas Giachino y Bazán y Bustos– desde hace mucho tiempo y nunca habían tenido inconvenientes. En esta ocasión sufrieron pérdidas materiales totales. Por ello, según informó Eduardo Correa de Defensa Civil, recibieron abrigo, alimentos y estimó que en 10 días podrían ser reubicados en una nueva vivienda. Los chicos están desocupados, aunque hasta hace poco tiempo se desempeñaban como mecánicos en un taller. Ahora, aguardan su nueva ubicación para retomar empleo en ese rubro. Reunión La altura del río frente al hidrómetro ubicado en el Puerto Nuevo era ayer de 4,66 metros, a sólo cuatro centímetros del nivel de alerta y a 32 centímetros de evacuación. En menos de dos semanas subió casi 45 centímetros y se aguarda el pico para los próximos días. Frente a esta situación, el jefe de Gabinete, Jorge González, confirmó a UNO que en la jornada de hoy, desde las 9, se reunirá el Comité de Crisis. Estarán miembros de áreas municipales como Salud, Defensa Civil y también integrantes de Prefectura, Ejército, Fuerza Aérea, Bomberos Voluntarios, Cruz Roja y Cáritas. En ese marco, confió que se analizarán los relevamientos realizados en estos días y adelantó que el gobierno municipal estima que 190 personas podrían tener inconvenientes en la capital provincial, en caso de mantenerse la crecida del río. Son de zonas ribereñas, como el Parque Costero, Bajada Grande, anegadizos de Anacleto Medina, Puerto Sánchez y sectores linderos a los arroyos urbanos. Centros de evacuados En caso de emergencias, la Municipalidad dispondrá de cinco centros de evacuados: son la sala Mayo del Puerto Nuevo, los cuarteles del Ejército y los jardines maternales Patito Sirirí –en Bajada Grande– y Casita de Ensueño, ubicado en barrio Santa Lucía y la Toma Vieja. Y las personas afectadas podrán comunicarse a los números 4320000 (Defensa Civil) y 4201825 (Acción Social). (Fuente: Uno)