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nte las críticas vertidas por el senador departamental de Islas (PJ), Eduardo Melchiori, a la llamada Ley de la Madera, promovida por el diputado provincial (UCR-Gualeguaychú) Osvaldo Fernández, por la que se pretende evitar que desde Entre Ríos se venda madera como materia prima a las plantas pasteras que se construyen en el Uruguay, especialmente a la firma finlandesa Botnia, el legislador radical sostuvo que “hay que decir qué interés defiende cada uno que opina sobre este tema. Nosotros defendemos la vida y la salud, derechos amenazados por la contaminación que provocará la planta de Botnia, y estos derechos tienen protección en la Constitución de la Nación y en la Constitución de la Provincia. Sobre el derecho a la vida y a la salud no hay nada que se imponga, mucho menos se puede invocar el comercio como un derecho mayor. El proyecto pretende golpear en un flanco estratégico de Botnia para que no se les venda materia prima y para que se vaya de la cuenca del Río Uruguay. Es un primer paso, luego se va a necesitar una ley nacional para que desde ningún punto de la república se le venda madera a Botnia. Además tiene mucho sentido común porque nadie va a ayudar a un vecino que lo va a contaminar o, dicho en otros términos, quién va a venderle el cuchillo a quien lo va a apuñalar ?”. En referencia a los dichos del senador justicialista, Fernández señaló en un correo enviado a INFORME DIGITAL que “Melchiori tiene que definirse en qué vereda está. Si está con Botnia, con la Asociación Forestal que sostiene que Botnia no contamina, si está con aquellos grupos empresarios a los que sólo les importa hacer negocios y no les interesa la defensa de la vida que son de capitales extranjeros más que nada chilenos ó si está con las Asambleas Ambientales, con los que luchamos por la vida y la salud, con el gobierno que planteó ante la Corte de La Haya que Botnia contamina, con los pequeños y medianos forestadores, con la Federación Agraria, con los que apoyamos el desarrollo del sector forestal y de la industria de la madera, con los diputados de todos los bloques partidarios, inclusive del PJ, que votamos por unanimidad la Ley de la Madera, en definitiva con el pueblo que exige la preservación del medio ambiente”. “Que se quede tranquilo Melchiori y que vote la ley, porque el proyecto no es inconstitucional. Cómo va a ser inconstitucional si está basada en la continuidad de la Ley 9644, que estableció a Entre Ríos como provincia libre de pasteras con procesos químicos, que fue aprobada por unanimidad ? Cómo va a plantear esta objeción si el proyecto está fundado en el artículo 124 de la Constitución Nacional que reconoce el dominio originario de los recursos naturales en manos de las provincias y en el artículo 41 de la misma constitución que protege los derechos ambientales de las personas que habitan el suelo argentino ? No puede plantear esto Melchiori porque esas normas son el fundamento de la Ley Antirepresas, vigente en la provincia desde 1997, y de la Ley 9644, votada el año pasado. Nadie ha objetado esas leyes, nadie se ha presentado ante un juez para plantear que son inconstitucionales”. “Por otro lado”- expresó el legislador radical- “el proyecto tiene partes que textualmente fueron redactadas por los forestadores del departamento Islas y sus asesores que están vinculados a la Asociación Forestal Argentina. Melchiori tendría que informarse mejor. Nuestro proyecto no perjudica a ningún sector forestal, no impide la venta de madera en el mercado argentino ni a terceros países que no sea el Uruguay; promueve el desarrollo forestal e incentiva la industria de la madera en Entre Ríos. Además, Melchiori tiene que saber que se está haciendo eco de algún cuestionamiento interesado hecho por voceros de la Asociación Forestal que, en realidad, representa a 21 socios que son empresas extranjeras, más que nada de capitales chilenos, que son dueñas de 380.000 hectáreas forestadas y que sólo tiene 14 socios argentinos que son dueños de 36.000 hectáreas forestadas. Es decir que esa entidad defiende intereses de grupos económicos extranjeros, que sólo quieren hacer negocios y no les importa que cientos de miles de argentinos sufran la contaminación y el envenenamiento del medio ambiente. Por eso, reitero mi pregunta: de qué lado está Melchiori ?”. “Invito al senador Melchiori a que recapacite, me pongo a su disposición para brindarle todos los elementos para que se de cuenta que el proyecto no es inconstitucional, no pierdo las esperanzas que recuerde que nació y se crió en Gualeguaychú donde tiene muchos familiares y que seguramente como médico que es no querrá que se enfermen por la contaminación que provocará la planta de Botnia”. Finalmente Fernández sostuvo que “se equivocan quienes dicen que el proyecto viola el Tratado del MERCOSUR o los tratados de comercio. Sobre el derecho a comerciar está el derecho a la vida y a la salud que tiene un valor superior. Los países tienen derecho a dictar normas que dejen de lado los tratados de comercio cuando está en juego un interés público superior como en este caso, para eso existen lo que se llaman claúsulas de salvaguarda y tenemos varios antecedentes. Hay que tener en cuenta, también, que hace poco el Uruguay prohibió la entrada de productos fabricados en San Luís y en Ushuaia y que ahora estaría por vedar la entrada de autos hechos en la Argentina. Por eso insisto, a quién defiende Melchiori a los isleños, a los entrerrianos, a los argentinos, ó a los capitales chilenos y al gobierno uruguayo ?”.-