P

or Ricardo Leguizamón (El Diario) La polémica píldora del día después, un método de anticoncepción emergencia que se utiliza a las horas de haber tenido una relación sexual sin protección, ya está en Entre Ríos, lista para ser distribuida a hospitales públicos y centros de salud de la provincia. El medicamento será incluido en el programa de Salud Sexual y Reproductiva que asiste fundamentalmente a mujeres que demandan algún mecanismo de planificación familiar. El secretario de Salud, José María Legascue, reconoció a EL DIARIO que “ahora no hay impedimentos” para su distribución, aún cuando aceptó que la accesibilidad de esa droga, el Levonorgestrel por 0,75 mg, podría generar opiniones adversas en sectores de la sociedad, fundamentalmente en las filas de la Iglesia Católica. “Pero esto ya ha sido autorizado por el Ministerio de Salud de la Nación, así que no creo que haya inconvenientes”, dijo. Sin embargo, la partida de la pastilla del día después que llegó a Entre Ríos está todavía en la sede central de Salud, por cuanto las autoridades no definieron todavía cómo distribuirla a toda la provincia. De todos modos, la red está aceitada: hay 429 efectores que actúan como cabecera del programa de Salud Reproductiva. DE QUÉ SE TRATA. La pastilla del día después —una droga que se utiliza como método de anticoncepción de emergencia cuando falla la protección en una relación— no sólo estará disponible ahora en los hospitales y centros de salud del Estado, sino que también, tal como lo anunció el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, quedará incluido en el programa Médico Obligatorio (PMO). Es decir que de ahora en más será accesible para los afiliados a prepagas u obras sociales sindicales. El fin de semana el ministro González García anunció la distribución a todo el país de la píldora —Entre Ríos está incluida, ya que buena parte de los anticonceptivos y preservativos que reparte el programa de Salud Sexual y Reproductiva llegan de la Nación— al sostener que el Estado la va a garantizar “el acceso gratuito para todas las mujeres para prevenir tanto embarazos no deseados como abortos”, según explicó. Y negó que se trate de un mecanismo que sea abortivo. “No hay ningún problema para distribuirla en Entre Ríos”, afirmó el secretario de Salud de la provincia. “Es una medicación que ya tiene el visto bueno de la Nación y que se podrá distribuir sin problemas, más allá de las reacciones de sectores rígidos y dogmáticos. Esa controversia se genera porque algunos consideran que la píldora es abortiva, y no lo es”, sostuvo Legascue. La función de la píldora es la de impedir la unión del espermatozoide con el óvulo. El método fue incorporado al Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, que fue aprobado por ley en el Congreso en octubre de 2002, y según los especialistas el Levonorgestrel, el principio activo de la pastilla del día después, tiene una efectividad del 95 %. TODAVÍA NO. Al margen por ahora de acceder a la pastilla del día después quedarán los afiliados al Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper), la mayor prestadora de salud, con un universo de afiliados conformado por un cuarto de la población entrerriana. El organismo no tiene todavía incluido en su vademécum al Levonorgestrel. “El hecho de que esté incluido en el Programa Médico Obligatorio no nos obliga a nosotros, que somos obra social provincial; sólo obliga a las obras sociales sindicales. En nuestro caso, dependemos de la Superintendencia de Salud de la Nación. Aún así, sería un tema a analizar si lo reconocemos o no. Pero todavía no se ha dado ningún caso de prescripción”, dijo Silvio Moreyra, titular de Iosper. De todos modos, el universo al que asiste el Estado desde el Programa de Salud Sexual y Reproductiva es bastante amplio: incluye el trabajo de 420 efectores, con una población de aproximadamente 100 mil mujeres. Para destacar La pastilla del día después es un método anticonceptivo denominado de “emergencia”, cuya droga base es la Levonorgestrel. El medicamento se compone de dos píldoras: la primera se debe tomar dentro de las 72 horas posteriores a una relación sexual en la cual el método de protección falló. La segunda pastilla se debe ingerir 12 horas después. Esas situaciones “de emergencia” pueden darse cuando se rompe el preservativo, falla el dispositivo intrauterino (DIU), o no hubo protección. Es aconsejable su uso por parte de toda mujer en edad reproductiva que después de una relación sexual evite quedar embarazada, y no posee contraindicaciones. Es discutible su carácter abortivo. El Ministerio de Salud de la Nación y la Secretaría de Salud de Entre Ríos coinciden en que no lo es. La Iglesia Católica, en cambio, opina lo contrario. Salud de la Nación informó que ya comenzó a distribuirla.