M
onseñor Hugo Santiago fue ordenado obispo en la catedral San Rafael, de la diócesis de Rafaela, que fue desbordada de fieles y tuvo como consagrante principal al obispo local, monseñor Carlos Franzini y como co-consagrantes a los obispos Jorge Casaretto, de San Isidro, y Francisco Polti, de Santiago del Estero. Monseñor Santiago fue consagrado en el mismo altar, donde exactamente hace 30 años fue ordenado obispo monseñor Casaretto. La celebración eucarística fue concelebrada por los obispos José María Arancedo, de Santa Fe; Mario Maulión, de Paraná; Carlos Ñáñez, de Córdoba; Gustavo Help, de Venado Tuerto; Ricardo Faifer, de Goya; Carlos Tissera, de San Francisco; Armando Uriona, de Añatuya; Estanislao Karlic, emérito de Paraná; Emilio Bianchi, emérito de Azul, y Moisés Blanchoud, emérito de Salta, como también sacerdotes diocesanos y de otros puntos del país. Entre el numeroso público estuvieron el intendente Omar Perotti, el presidente del Concejo Municipal Luis Castellanos, el diputado provincial Roberto Mirabella; el pastor de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata de Humboldt Juan Wagner, la directora de Cáritas diocesana Blanca de Serniotti, diáconos permanentes y seminaristas diocesanos, concejales, presidentes comunales, delegaciones de Santo Tomé, María Juana, Rosario y de las parroquias donde estuvo el flamante obispo, entre otros. Tras las lecturas con la presentación del nuevo obispo, designado el 5 de diciembre de 2006 por el papa Benedicto XVI, monseñor Franzini explicó en su homilía la importancia del ministerio episcopal. También recordó la ordenación episcopal de monseñor Casaretto y citó al extinto arzobispo de Santa Fe y primer obispo de Rafaela, monseñor Vicente Zazpe. "Cuando un nuevo obispo llega a la Iglesia actualiza la certeza del misterio y recobra el esfuerzo de crecimiento. Cuando un presbítero es ordenado obispo la Iglesia crece». Es miembro del colegio episcopal y también crece la Iglesia de Santo Tomé y la de Rafaela", destacó. Monseñor Franzini agradeció a Santiago, en quien dijo encontrar desde el primer día de su llegada a la diócesis “un hermano cercano, un amigo fiel, un consejero lúcido, un colaborador eficiente y leal; siento que con su partida mi vida se empobrece, aunque me consuela la certeza de que Dios siempre nos gana en generosidad y sabe suplir con creces su ausencia". Luego de un interrogatorio entre Franzini y Santiago, se cantaron las letanías. El obispo consagrante impuso las manos sobre la cabeza del elegido y el resto de los obispos hicieron lo mismo. Después Franzini tomó el Evangelio y lo impuso abierto sobre Santiago, invocando una oración a Dios; ungió la cabeza con el santo crisma, colocó el anillo en el dedo anular de la mano derecha del ordenado, puso la mitra y finalmente le entregó el báculo pastoral, ante el aplauso de los presentes. Monseñor Santiago Monseñor Santiago nació el 12 de abril de 1954 en la localidad de María Juana, provincia de Santa Fe y realizó sus formación filosófica y teológica en el Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora de Loreto, de Córdoba. Fue ordenado sacerdote el 19 de diciembre de 1985 por el entonces obispo de Rafaela, monseñor Héctor Gabino Romero, en una celebración eucarística que tuvo lugar en la parroquia Santa Juana Francisca Fremiot de Chantal, de su ciudad natal. Hasta el momento de su designación como obispo, era párroco de San Guillermo, en la ciudad de Lehmann, a escasos 20 kilómetros de Rafaela; y cumplía funciones de Vicario Episcopal de la Zona Sur de la diócesis; profesor de Teología en la filial Rafaela de la Universidad Católica de Santiago del Estero; y director de la Escuela Diocesana para el Diaconado Permanente.