E

l intendente electo de Paraná, José Carlos Halle, está preocupado por las implicancias del Presupuesto 2007 en el funcionamiento de la ciudad. Haciendo números, calculó que la ordenanza se queda corta en 30 millones sólo en la partida Personal, es decir que lo que prevé para sueldos en realidad no alcanzará a cubrir todas las erogaciones por este concepto que la Comuna deberá hacer a lo largo del año. Agregó que se presenta además otro problema, que es la baja que se verificó este año en la recaudación de tasas y aranceles. Frente a esto, entonces, trazó una perspectiva catastrófica: la Comuna se convertirá en una “mera pagadora de sueldos” y si las cosas siguen tal como están, la ciudad se quedaría “sin posibilidades de prever inversión pública (ya deprimida al máximo en los últimos años) y sin posibilidades de adquirir insumos básicos para el funcionamiento del Estado municipal y la prestación de servicios imprescindibles, como potabilización adecuada del agua y provisión de alumbrado público”. PERSONAL. Recordó Halle que durante la discusión del proyecto de ordenanza de presupuesto 2007 “intentamos hacer primar la racionalidad y la seriedad”. Sin embargo, explicó, se aprobó “una norma que expresa un presunto equilibrio que no es tal, porque subestima el gasto en personal, ya que calcula la partida para sueldos en 130 millones cuando el gasto mensual en marzo de 2007 fue de 12.344.294 pesos, lo que multiplicado por los 12 meses arroja 148.131.528 pesos, a lo que debe agregarse el pago del aguinaldo, totalizando 160.475.822 pesos, es decir, casi 30 millones más de lo presupuestado. Y, por otro lado, sobreestima la capacidad recaudatoria del Municipio previendo la suma de 114.715.200 pesos, cuando la realidad indica que en el ejercicio anterior -aumento de tasas mediante- se recaudaron 20 millones menos”, detalló. Señaló, por otro lado, que “hubo una enorme cantidad de contrataciones, designaciones y recategorizaciones de personal, que permiten prever un desmesurado aumento del gasto en ese rubro para el año corriente”. Y dijo que la planta de personal efectivo aumentó casi un 25% entre noviembre de 2006 y marzo de 2007 (634 agentes más) y que, de acuerdo al Presupuesto recientemente aprobado, ese incremento en la planta permanente llegaría al 46%, con más de 4.000 agentes, sin contabilizar los “casi 1.000 contratos” de obras y servicios que autorizó el Concejo Deliberante. “Para el año 2007, en Paraná, de no tomarse medidas adecuadas, el 131% de los ingresos por recaudación propia estarán afectados al pago de personal”, de lo que se desprende que los ingresos de jurisdicción municipal ni siquiera alcanzarán a cubrir los gastos en empleados. DÉFICIT. “No hay correspondencia entre la contratación y designación de personal con los servicios efectivamente prestados al vecino”, manifestó más adelante. “Tenemos más agentes municipales y eso no se refleja en una ciudad más limpia, iluminada ni con mejores servicios”. Comparó entonces que mientras en Paraná el 75% de los gastos corrientes se los llevó el pago al personal, Rosario gastó en 45% de esas erogaciones, Santa Fe el 69% y Córdoba el 57%. Entendió que “el desmedido ritmo de crecimiento de los gastos corrientes y el elevado déficit presupuestario se agrava por un dato no menor: la recaudación de la Municipalidad cae a ritmo alarmante, pese al aumento de las tasas que se impuso a los vecinos durante el año 2006”. “Esos son algunos de los aspectos preocupantes desde el punto de vista financiero. La perspectiva es que, de no corregirse el rumbo de la administración de la Comuna, los paranaenses quedaríamos sin posibilidades de prever inversión pública (ya deprimida al máximo en los últimos años) y sin posibilidades de adquirir insumos básicos para el funcionamiento del estado municipal y la prestación de servicios imprescindibles”, dijo. Concluyó Halle que “el rumbo financiero” de la Municipalidad es “muy preocupante” por el “desmedido ritmo de crecimiento de los gastos corrientes, muy superior al crecimiento de los ingresos, el elevado déficit presupuestario”, y por la sanción de “un Presupuesto que convierte a la Comuna en una mera pagadora de sueldos, sin posibilidad de realizar las obras que la ciudad necesita ni prestar los servicios esenciales por los cuales los vecinos abonan las tasas”. Mencionó que en ese contexto, su sector político ha “mantenido una postura respetuosa y racional” y pretende, como respuesta, de las autoridades municipales “una reciprocidad que se demuestre en una transición más razonable, acorde a la seriedad del problema financiero municipal”, finalizó. HALLE ACLARÓ QUE “LAS AUTORIDADES EN EJERCICIO de gobierno tienen un mandato popular hasta el 10 de diciembre y por eso creemos imprescindible transitar el camino de la seriedad y de la responsabilidad política y ciudadana. Es necesario ser prudentes en la crítica y generosos en los aportes, asumiendo que el difícil contexto que nos rodea sólo es posible sortearlo con humildad, diálogo institucional con la Provincia, tal como lo han hecho otros municipios, con el objetivo de generar un marco razonable para la transición hacia el recambio de autoridades”. (Fuente: El Diario)