F
ue durante una reunión en la Parroquia del Carmen, donde ofició como mediador el delegado de la Pastoral Social del Arzobispado, padre Gabriel Battello. El conflicto había resurgido el miércoles, después de que trascendiera que la Comuna les iba a descontar los días no trabajados a los recolectores que hicieron paro. Cuando llegó a oídos de los empleados la versión, se concentraron todos en el Palacio Municipal pero los funcionarios presentes les dijeron que sólo el Intendente tomaba las decisiones. Así, se quedaron en el Municipio a la espera de una respuesta hasta bien entrada la noche del miércoles y no salieron a juntar la basura. Pero al final la reunión se realizó ayer con buenos resultados. Aunque las partes —el turno noche, las autoridades y el gremio— venían encontrándose en el seno de la Parroquia desde el martes 19, no había consenso en cuanto a cómo aplicar las sanciones que a criterio del Ejecutivo les correspondían por el volcado de basura en el Palacio y los días de paro. La situación se complicaba porque el Sindicato Unión Obreros y Empleados Municipales (Suoyem) pedía un “gesto correccional” para los empleados que habían decidido una medida de fuerza por afuera del gremio. Como se recordará, el turno noche se distanció del sindicato porque éste había aceptado un incremento del 9 % en el básico con el Ejecutivo “sin consultar a las bases”. Pero ayer el sindicato condescendió a que los funcionarios cambiaran los recortes de sueldo por trabajo extra y el turno noche se comprometió a salir a las 20 a hacer sus circuitos. El padre Battello estuvo el miércoles hasta bien entrada la noche “de un lado para el otro y con el teléfono en la mano” atendiendo la resolución del conflicto en el que oficia como mediador desde el lunes 18, a pedido del arzobispo Mario Maulión (a quien acudieron los trabajadores en busca de ayuda). “Ayer (por el miércoles a la noche) no salieron, no. Estaban agotados, nerviosos, no estaban como para salir a caminar”: habían estado todo el día en los pasillos del Palacio esperando una respuesta del intendente Julio Solanas. La reunión pasó para ayer y “hubo momentos de tensión pero todo terminó mucho mejor de lo que esperaba”, comentó el presbítero. “Gracias a Dios, las tres partes facilitaron las cosas: lo importante es que la ciudad no queda sucia y los obreros no tienen quita de sueldo. Habrá un replanteamiento del trabajo, con lo cual reconocen su responsabilidad y devuelven (los días de paro) con trabajo. Se atenderán los baldíos, los basurales, los lugares de quema, y esto lo van a hacer en horas extra”, explicó Battello y agregó que el Intendente “aprobó la acordada, con el compromiso de arreglar las planillas de sueldos para reintegrar” los descuentos. “Lo más emocionante fue la gente que está afuera, pasaron frío afuera, es gente simple, ruda, y ver gente joven y gente grande a los que se les caían las lágrimas y ver los abrazos daba cosquillas”, confió el padre. Se refería los trabajadores del turno noche que esperaron en la vereda los resultados de la charla entre los funcionarios, sus representantes y los seis delegados del Suoyem que concurrieron a la reunión. (El Diario)