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uatro pacientes, entre ellos una nena de Colón, acceden de esta manera a un trasplante luego de una angustiosa espera en las listas únicas del INCUCAI. Tres equipos médicos provenientes de la ciudad de Buenos Aires se movilizaron vía aérea hasta el Aeropuerto de Paraná durante las horas de la madrugada de hoy, trayendo cada uno 5 profesionales especializados en ablación y trasplante de órganos. El hígado fue destinado a una paciente de la localidad entrerriana de Colón, una nena de tan solo 2 años y medio de edad, la cual se encontraba en estado de urgencia en el Hospital Garrahan. El equipo de la Fundación Favaloro ablacionó el corazón, el cual fue implantado en una paciente de 60 años, procedente de la ciudad de Buenos Aires. Los primeros informes señalan una buena evolución inicial del trasplante. El tercer equipo, que pertenecía al Instituto de Nefrología de Buenos Aires, ablacionó el páncreas y uno de los riñones para realizar un trasplante “en bloque” en una paciente misionera de 33 años de edad. Este tipo de implante se produce cuando el paciente tiene una insuficiencia renal agravada por una diabetes. El equipo médico del CUCAIER también participó en la ablación del segundo riñón, el cual fue destinado a una paciente formoseña de 29 años, la cual contaba ya con un último acceso vascular para la diálisis. Si bien los riñones tienen prioridad en la distribución de los pacientes de la provincia donde se produce el operativo de donación, la condición de último acceso vascular da prioridad, ya que en ese caso no quedan más opciones para poder conectar al paciente a la máquina de hemodiálisis. Momentos de tensión se vivieron cuando los tres aviones tuvieron que aguardar la autorización de los operadores de pista de Buenos Aires, ya que existía la posibilidad de que en las primeras horas de la mañana esa zona tuviera complicaciones con neblina. Finalmente los equipos pudieron despegar de Paraná y llegar a destino con su preciosa carga. Por último, es importante agradecer a la familia del donante por su inmensa entereza y generosidad, las cuales dieron la posibilidad de nueva vida a 4 personas que dependían de su solidaridad para seguir viviendo. A ellos y a todo el personal del Hospital San Martín, como así también a las fuerzas de seguridad y personal de aeropuertos, vaya el reconocimento en nombre de esas personas y de sus familiares.