E

l robo de motocicletas es uno de los puntos de la inseguridad que tiene a maltraer a la Policía y pese a las distintas medidas la actividad no decrece. En medio de esta situación, siempre se sospechó que personal policial podría estar detrás del negocio ilegal. En esta oportunidad las autoridades de la Jefatura Departamental de Policía de Paraná dispusieron dos sumarios administrativos y el pase a disponibilidad de un suboficial y su esposa, también policía, por considerarlos sospechosos del robo de motocicletas en Paraná. El lunes a la mañana se supo que a una mujer de 25 años le robaron la motocicleta Yamaha 125 en calle 25 de Mayo de Paraná. La víctima del hecho notificó rápidamente a la Policía, que dispuso un operativo con el fin de localizar la moto robada y detener al ocupante. A los pocos minutos una motocicleta del Comando ubicó la moto y al ocupante sospechoso y emprendió una persecución que terminó en una vivienda del barrio Jauretche. Al llegar más móviles se pudo saber que el delincuente ingresó a la finca, donde se guareció. Las autoridades policiales solicitaron al juez de Instrucción Eduardo Ruhl el allanamiento de la casa y la detención del sospechoso. Allí la sorpresa del personal del Comando Radioeléctrico fue grande porque dos personas comenzaron a agredirlos y a amenazarlos de muerte y con emprender una denuncia en la Fiscalía de turno. Los alterados era un matrimonio de policías. La mujer actualmente cumple tareas en la comisaría novena, en tanto que el esposo se encuentra con licencia por enfermedad. Los investigadores policiales tenían sospechas que el policía, sobre todo, podría estar relacionado directamente con conocidos delincuentes de Paraná. Hace un tiempo se produjo el robo a un frigorífico de aves en Hernandarias y uno de los sospechosos logró zafar de las imputaciones existentes en la causa porque, casualmente, el policía aseguró en sede judicial que había estado con el detenido esa mañana en que se produjo el robo, por lo que no podría haber estado en Hernandarias. Requisa domiciliaria Con los recaudos legales correspondientes y la presencia de un delegado judicial, la casa donde había ingresado el delincuente con la moto fue allanada. Pese a la violencia de los titulares de la finca, se ubicó la Yamaha robada y al sospechoso. Desde la Policía se informó que un hombre de 26 años fue detenido por el hecho y trasladado luego a la sede de la Alcaidía de Tribunales para ser puesto a disposición del juez de Instrucción en turno. Finalizado el procedimiento, las autoridades departamentales de Policía de Paraná iniciaron rápidas medidas administrativas y judiciales para aclarar el ilícito en que se vio involucrado el matrimonio de policías. Desde la fuerza se hizo saber que el policía cuestionado podría formar parte de una banda de delincuentes que roba motos y que incluso cuenta con un aceitado asesoramiento de profesionales con actividad en la ciudad, que son los encargados de brindarles todas las estrategias para poder mejorar las situaciones en las denuncias que se investigan en la Justicia. Por otra parte, hace un tiempo se solicitó el traslado de la mujer de la comisaría segunda porque en la dependencia de calle Gualeguaychú se extravió mercadería, en tanto que hubo quejas porque algunas personas dejaron entrever que se les vendieron los sellados. Urgentes sumarios El jefe departamental de Policía de Paraná, Hugo Miño, confirmó el procedimiento ejecutado el lunes al mediodía con la detención del sospechoso y el secuestro de la moto robada. Además el alto oficial alertó que “se iniciaron las actuaciones prevencionales por el robo de la moto, pero además se avanzó con otra causa por las amenazas de los policías contra uniformados del Comando. Todo esto derivará en un sumario administrativo y la solicitud del inmediato pase a disponibilidad de ambos”. Miño aseguró que “en la Policía no se protege a nadie y este tipo de actitudes son severamente repudiadas, por lo que se disponen las medidas correspondientes tanto judiciales como administrativas”. Fuente: UNO