N

atalia Correa, para Informe Digital El Doctor Julio Rodríguez Signes declaró, a pedido de la defensa del Contador César Ferrari, dando un respiro al acusado con sus declaraciones. En este sentido, hizo su aporte respecto de las dos causas que se le imputan a Ferrari. Rodríguez Signes se desempeñó como edil entre el año ´95 al ´99, siendo dentro de esta función ocupó el cargo de Presidente de la comisión de control de la Liquidadora desde diciembre de 1995 hasta la misma fecha del ´97 en que pasó a ser Presidente del HCD dejando la titularidad de esa comisión. Esclareció en principio que la acusación sobre el canje de cheques acreditada a Ferrari no se enmarca en el período en que él ya formaba parte de la comisión antes mencionada. Por otra parte, aceptó que “conozco bien la cuestión” porque “intervine en la gestión de personas que venían a solicitar ayuda social al Concejo y en conocimiento que existiera un convenio con un deudor nosotros tratábamos de solucionarle el problema a las personas que solicitaban apelando al convenio”. Respecto de su vinculación con el acusado dijo en su declaración el ex concejal que inmediatamente a haber asumido en el ´95 “tomé contacto con lo que era el residual del Banco Municipal”. “Era una situación era francamente lamentable…complicada, los empleados estaban haciendo huelga, prácticamente no había una estructura que funcionara correctamente…las carpetas estaban desparramadas…se había perdido documentación…”, fueron algunas de las palabras con que Rodríguez Signes describió el panorama de la institución en esa época. Seguidamente declaró que en ese entonces “el contador Ferrari no estaba” y por eso “si lo convocamos al contador Ferrari para que aporte”. Concretamente a la causa por Canje de Valores este señaló no recordar haber hecho alguna observación al respecto aunque sin titubear aseguró reiterativamente que “si hubiera pasado no lo hubiera observado porque en canje de valores no lo hubiera considerado yo una operatoria irregular”, aseguró. En aquel momento “la intención política del Concejo Deliberante era recuperar el Banco” manifestó comentando una autorización de partida presupuestaria, mediante ordenanza, para integrar una caja de crédito que luego fue utilizada para indemnización del personal y otros gastos de la institución. “El límite de lo que el Banco podía hacer o no podía hacer… a nivel de la actividad del banco era bastante discutible”, resumió Rodríguez Signes agregando en defensa del acusado que las operatorias que denominan “mesa de dinero”, al referirse al canje de valores, es porque “tienen un desconocimiento absoluto” o porque encubren alguna otra “intencionalidad”. A propósito de malas intenciones el ex funcionario municipal se refirió al Convenio con el corralón América acusando a la Contadora Silvia Cuatrín por haberse fundado en intereses políticos para rechazar la operatoria de Triangulación, alegando que no cumplían la vía administrativa cuando en la práctica no había otra manera. Básicamente avaló las declaraciones de Ferrari al respecto. El convenio se firmó en el año 1997 y aceptando haber hecho uso de lo que habilitaba el mismo relató que a las oficinas del concejo asistía mucha gente a solicitar ayuda social y, midiendo las necesidades de los vecinos, los ediles brindaban respuesta haciendo uso de ese capital en especies que tenía la comuna para destinar. En ese marco, Rodríguez Signes declaró que no se denominaba como Triangulado el vínculo establecido en torno al convenio sino que se lo llamaba “cuenta de relación” abierta para ser utilizada en cuanto a que “la municipalidad y el banco eran deudores y acreedores entre sí”. Asimismo, el vínculo entre el Banco y la Municipalidad fue calificado como “normal” por el declarante. No obstante el ex concejal consideró ratificar que se trataba de entregas a particulares y que los funcionarios “como Villaverde” u otros que puedan involucrarse sólo participaban en el pedido como gestores para que sean otorgados a personas que realmente carecían de recursos y solicitaban por su intermedio alguna ayuda en materiales de construcción. Ahondando en la postura obstructiva de quien se desempeñaba como Secretaria de Hacienda en dos gestiones consecutivas, de Humberto y Sergio Varisco, manifestó no aceptar el motivo declarado por ella ya que no impidió “otras operatorias”, citando el retiro de material pedido por “Magda Mastaglia de Varisco para la construcción de una capilla”. “Por qué después la Secretaria de Economía rechazó el convenio de la Cuenta de Relación…estimo yo que por expresas razones políticas”, opinó agregando no entender cómo “no aceptó otorgarle ayuda social en materiales a quienes lo necesitaban”. “Hubo una exclusiva cuestión de índole político porque al intendente –Humberto Varisco- no le habrá gustado que los concejales ayudemos a las personas y porque a fines del ´99 “empezaba la disputa de las elecciones…el intendente habrá dicho yo con esto me voy a manejar de otra manera”, sentenció Rodríguez Signes. Asimismo, afirmó que “no tengo la más mínima duda de que el Liquidador quedó atrapado en una decisión política de la Municipalidad”, acotó afirmando que “no creo de ninguna forma que haya habido un ánimo de perjudicar al Banco municipal por parte del legislador”. El interrogado puso como “absurda” la acusación hacia Ferrari atribuyendo a que si “el banco técnicamente se perjudicó fue porque el Poder Ejecutivo Municipal quiso que se perjudicara”. Con el mismo tono de la declaración, Rodríguez Signes reiteró que cualquier problema técnico en las operatorias del Banco ”lo desligo de la actitud del Contador Ferrari y lo atribuyo a una actitud del Ejecutivo Municipal” que, a decir del ex concejal, actuaba así con “todos los que no apoyábamos la candidatura de Sergio Varisco”.