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una semana de las fiestas navideñas la cantidad de comerciantes que gestionaron la habilitación para vender pirotecnias es notoriamente menor a 2006. Hasta el momento sólo hay 10 negocios autorizados por la Dirección de Control Comercial de la Municipalidad y Bomberos Zapadores, mientras que otros cinco locales aguardan cumplir con una serie de requisitos requeridos para obtener el permiso. La diferencia con el año pasado es evidente, ya que para el mismo periodo había 60 locales habilitados para la venta de cohetes. El plan municipal prevé inspeccionar la comercialización de pirotecnia en locales que no estén habilitados para su venta. Mario Veloz, director General de Control Comercial y Concesiones dijo que “habrá severos controles y hasta secuestro de mercadería por parte de la Policía para aquellos que no cumplan con las normas”. Por otra parte, se estimó que para los días previos a las fiestas de fin de año habrá más demanda de habilitación. El funcionario comentó que ya se están ocupando de la venta de pirotecnia en la vía pública, pero adelantó que más cerca de las fiestas se agudizaran los operativos. Los requisitos principales para abrir un local son tres: tener la habilitación municipal, poseer el certificado de Bomberos y la documentación requerida por el Registro Nacional de Armas (RENAR). En caso de no tener estas exigencias el propietario será sancionado y su mercadería decomisada. Caída Este año los negocios habilitados para vender pirotecnia disminuyeron. Según el jefe de los Bomberos Zapadores de la Policía de Entre Ríos, Eduardo Furios, esta situación se debe a que hay mayores controles y menos gente dispuesta a realizar todos los trámites para abrir su negocio. Sin embargo, Furios presagió que la semana próxima será agitada, ya que prevé que unos 40 comerciantes se acerquen a realizar los trámites. “Siempre en los días previos el trabajo es superior”, adelantó para explicar que el promedio de años anteriores es de 60 negocios. El funcionario policial señaló que desde hace un tiempo vienen trabajando con la Municipalidad y las áreas respectivas para tratar de hacer un servicio de prevención contra incendios en los locales que comercian pirotecnia “para resguardar no sólo el lugar de trabajo sino para que también prevengan a aquellas personas que van a comprar estos productos”. Furios aclaró que puede haber más negocios expendiendo pirotecnia sin permiso, ya que en algunos casos se obvian los controles. En ese orden afirmó que el permiso es renovable todos los años. El efectivo de la Policía de Entre Ríos explicó que Bomberos asesora al comerciante sobre el material que tienen para la venta. “Ya se conoce a los comerciantes que quieren vender con responsabilidad”, dijo Furios, quien aseguró que muchos se molestan por lo extenso y lento del trámite. En Bomberos Zapadores se realiza un expediente y se revisa el lugar. Consejos útiles para un buen uso Eduardo Furios aconsejó que “los menores no deben manipular cohetes”, y afirmó: “En caso que se quieran utilizar, deben ser manipulados por personas mayores y no dejarse en manos de menores, por más leve que sea la explosión”. Además recordó que los cohetes deben ser accionados “de a una a la vez, no guardarse en los bolsillos, poner cuidado en que sea lanzada a un espacio libre y no dentro de envases”. Por último recordó que siempre se les aconseja a los comerciantes que no expendan pirotecnia a menores de edad. No comprar “truchos” Desde Bomberos Zapadores se bregó para que los ciudadanos no compren pirotecnia “trucha” en la vía pública. Para Furios los controles contra la venta de cohetes ilegales ayuda a bajar la cantidad de personas quemadas. “La venta callejera es el principal problema. Hay que tomar conciencia y no adquirir en la calle cohetes, ya que puede tener en sus manos un artefacto con un poder incontrolable”, sentenció. Accidentes Todos los años en los días de Navidad y Año Nuevo se registran accidentes por maniobrar pirotecnia y generalmente los más afectados son los niños que sufren quemaduras de diversos grados, principalmente en los miembros superiores. En 2006, sólo ingresaron a las guardias del hospital San Martín y San Roque, cinco personas lesionadas por uso de pirotecnia. Uno de los lesionados fue de gravedad, ya que sufrió la amputación parcial de un dedo y fractura en otro. (Uno)