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na situación confusa y preocupante se vivió en la sala de juegos del Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social que funciona en 25 de Mayo 255, en Paraná. Marcelo Ríos, vocero de ATE, dijo que un jefe de sala, Aldo Trujillo, dio la directiva al personal policial para que trabase las puertas, e impidiera la salida del personal, que tenía previsto retirarse a las 10, en el marco de una medida de fuerza anunciada con antelación. Los trabajadores tenían previsto hacer oír sus reclamos en demanda de una mejora salarial y mejores condiciones de trabajo, señaló. “Los empleados no hacían otra cosa más que reclamar cosas que consideran justas. Están trabajando en malas condiciones, no hay suficientes extractores de aire por lo cual conviven con el humo del cigarrillo de la gente que fuma y que asiste a la sala de juegos, y además hay sobrecarga de horas de trabajo”, dijo Ríos. Flavio Fernández, delegado de los trabajadores de la sala de juegos, habló también de “persecución” y “abuso de autoridad” de parte de funcionarios del Iafas. “La persecución laboral que tenemos de los jefes a los empleados es constante, y esto hace imposible trabajar con tranquilidad. A esto se suma las malas condiciones en que se trabaja. No tenemos sala de descanso acorde, convivimos con el humo del cigarrillo y los baños son un desastre. Esto genera un malestar entre todos los trabajadores”, explicó el dirigente. El malestar comenzó a hacerse sentir desde el martes, cuando empezaron las asambleas en la sala de juegos del Iafas en reclamo de esos puntos. Aunque ayer, cuando tenían previsto hacer conocer esas demandas a las autoridades del Iafas, “los compañeros quedaron secuestrados, y por eso el sindicato tuvo que convocar a un escribano y a un abogado”, señalaron los delegados de ATE.