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��Lamentamos este conflicto. Sé que la enorme mayoría -esos miles y miles de entrerrianos que no son productores, esos que no están relacionados con el campo- no lo desea. Y yo tampoco”, aseveró el gobernado Sergio Urribarri en una carta dirigida a los ciudadanos entrerrianos. “Las diferencias por el dinero que no se quiere ingresar al fisco podrían dirimirse de otra manera. Y aunque no se llegara a ningún acuerdo, no hay ninguna justificación para sitiar ciudades enteras poniendo en riesgo la vida y el alimento para miles de personas, la escolarización de miles de niños. Todo por una cuestión de dinero”, consideró. “Nunca en toda mi vida política levanté la mano contra alguien y no lo voy a hacer ahora. Quienes hoy promueven y disfrutan del hostigamiento a mi gobierno, a mi persona, a mi familia y a mis intendentes -porque los considero mi gobierno también- ya tendrán, a su tiempo, su debida respuesta. Y aunque hoy son lo menos importante, también la tendrán aquellos de acciones oportunistas y omisiones flagrantes”, expresó luego. “Lo importante es guardar la calma y preservar los servicios críticos. No seguir a quienes están buscando sacar tajada política de esta historia”, advirtió. “Sé que los chacareros, para los que he trabajado estos últimos 90 días dentro de mis marcos de acción y para los que he logrado cosas valiosas que pasada la crisis sabrán reconocer seguramente, están enojados. Pero ese enojo no los puede transformar en lo que no son, ni nublarles la razón para ponerlos al servicio de intereses espurios”, señaló. Y solicitó: “Estimados hermanos entrerrianos, liberen las rutas. Permitan el abastecimiento de sus propias ciudades. No hagan sufrir por este conflicto a quienes no lo merecen. No presionen al gobierno a través de terceros inocentes. Por favor, no fuercen a mi gobierno a tomar medidas drásticas. No crean en los cantos de sirena de los dirigentes que hoy, de la nada y como nunca antes, aparecen a su lado. Y tampoco en los anarquistas del cuanto peor mejor. La acción directa a veces es un camino sólo de ida”, indicó. “Les pido que aún en su enojo respeten las reglas de la democracia y las instituciones. Mientras tanto, estaré firme cumpliendo con mi deber al frente del gobierno provincial y lo mismo el resto de todos y cada uno de los intendentes municipales, abogando por la superación de esta situación”, concluyó. Nunca es tarde El mandatario expresó también a la ciudadanía que “nunca es tarde para explicar; para entender; para entenderse; y para hacer lo que hay que hacer”. Y explicó que las retenciones móviles son necesarias “porque ayudan a combatir la inflación, promueven la diversificación productiva y ayudan a la seguridad alimentaria de la Nación y aumentan los ingresos del Estado para ejercer el rol de distribución de ingresos que le corresponde”. Luego, brindó algunos datos de relevancia: “En los últimos 9 meses el precio mundial de los alimentos ha subido un 45% (FAO), y en diciembre del 2007 se registró el alza del precio mas alta en casi 20 años. Si permitimos que esos incrementos se reflejen totalmente en el mercado interno, los alimentos serían inalcanzables para la mayoría de la población”, advirtió. Y acotó: “En la última campaña la soja superó en Argentina el 50% de la superficie sembrada, reemplazando a otras actividades productivas imprescindibles para conformar la canasta alimentaria básica nacional. Las retenciones móviles provocan un cambio en las rentabilidades relativas, que dan sustento, al proceso de diversificación productiva y seguridad alimentaria”. “El problema central del pequeño productor agropecuario es el sistema de producción vigente, no las retenciones móviles. Los productores más pequeños, los chacareros y la mayoría de los medianos no son exportadores. No tienen la capacidad de compra de los insumos de los grandes o de los pools de siembra. No tienen el mismo acceso a la tecnología. No todos los arrendatarios son grandes pools. El pequeño propietario que le arrendó algo de campo al vecino a precio fijo o el que nosotros llamamos contratista (no tiene campo, si maquinarias) está hoy en problemas, ya que no puede competir con aquellos (pools). Este es el gran problema de Entre Ríos”, destacó. “Los mercados concentrados hacen que los pequeños y medianos productores agropecuarios vendan normalmente su producción a un intermediario comercializador-exportador, quien le resta al precio no sólo las retenciones sino también el diferencial otorgado por su poder de mercado y la situación fiscal del productor. Esto es muy común sobre todo en el interior del país. Entonces, ¿cuál es el problema?”, inquirió. “Los datos demuestran que la micro-pequeña y mediana empresa agropecuaria viene desapareciendo en los últimos años, porque la causa más importante no son las retenciones sino el sistema de producción que se ha ido consolidando, que tiene mas que ver con un negocio financiero que productivo, al que sólo puede acceder el capital concentrado, bajo la forma de grandes contratistas, pools de siembra, etcétera”, prosiguió. “Datos oficiales señalan que entre 1998 y 2002 desaparecieron 5.555 empresas agropecuarias; que el 94 % correspondía a campos de menos de 200 hectáreas; que el 75 % de las explotaciones entrerrianas tiene menos de 200 hectáreas y suma el 16% de la superficie explotada; que la población rural en 1960 era del 50 %. En 2006 se redujo al 15 %; y que la soja ocupa el 67 % de la superficie sembrada y desplaza a la ganadería a lugares marginales y sacrificó 600 mil hectáreas de montes nativos”, detalló. “El Estado tiene mucho por hacer para mejorar las estructuras de costos al interior de las cadenas agroalimentarias. Y los productores deben poder permitir esa acción ordenada. Proponemos la formación de una Mesa Provincial Agropecuaria donde -entre otras cosas-, se acuerde la asignación de subsidios para insumos a pequeños y medianos productores. Asimismo, desde el gobierno provincial se impulsarán acuerdos efectivos con el Banco de la Nación Argentina para el otorgamiento de líneas de crédito destinadas a capital de trabajo y la incorporación de tecnología”, comunicó. “Consideramos que la actual coyuntura internacional ofrece una oportunidad inmejorable para destinar parte de la renta agraria a la generación de un proceso de diversificación productiva, con equidad y sustentabilidad ambiental. Por tanto necesitamos conformar un Fondo de Reconversión Productiva que tenga como objeto casi único avanzar sobre las ventajas enormes que se logran con la diversificación agropecuaria”, detalló. Por último, el gobernador expresó: “Nunca es tarde para comenzar a hacer lo que, desde hace meses, queremos hacer. Mucho antes que el problema con las retenciones. Y es lo que deberemos hacer aún cuando el problema por las retenciones se supere. Comencemos”, instó.