D

e esta manera, el joven de 26 años que se encuentra alojado en el penal de la capital entrerriana deberá conocer en los próximos días la fecha en la que se iniciará su proceso. Pereyra fue asesinado a golpes en la noche del viernes 7 de octubre de 2006 en el corazón del barrio 25 de Mayo en Paraná. El sargento de 56 años que se encontraba en la parte final de su carrera activa, fue provocado verbalmente por dos personas que durante varios días habrían tenido la misma actitud agresiva hacia el uniformado. Pereyra se encontraba en su casa con su familia, cuando cansado de las exteriorizaciones agresivas de los hermanos Duro, salió a saldar las diferencias. Tras varios minutos, Pereyra no regresó y la esposa lo encontró casi sin vida con varios golpes letales en la zona craneal y torácica. El cuerpo del policía fue localizado en un terreno ubicado en calle Churruarín entre Benavento y Perette. La investigación policial a cargo de pesquisas de la División Homicidios logró a las pocas horas relacionar con el violento hecho a dos hermanos de apellido Duro. Sin bien en la causa no se lograron ubicar testigos directos, el testimonio de los detenidos y las propias pericias le alcanzaron a la jueza Yedro para procesar a Raúl Juan Duro, de 26 años, y dictar simultáneamente el sobreseimiento de su hermano. El querellante particular en la causa, Marcos Rodríguez Allende, comentó: “La fiscal Nader entendió, al igual que nosotros, que la investigación en instrucción se encuentra agotada. Y teniendo en cuenta la existencia de elementos objetivos y serios que nos permiten aseverar que el imputado fue la persona que le provocó estas gravísimas heridas que trajo como consecuencia la muerte de este funcionario policial, es que compartimos el pedido de elevación a juicio”. El letrado destacó que “la causa avanzó notoriamente por el propio testimonio del procesado que reconoció ser el autor de los golpes. Él dijo que fueron producto de la defensa ante el ataque efectuado por el policía, situación que obviamente no compartimos y en el juicio reclamaremos condena por entender que está acreditado el Homicidio simple”. “En el expediente figura que a la víctima la agredieron verbalmente y el policía reaccionó pero fue reducido a golpes letales”, enfatizó el querellante. Sobre la investigación, señaló que “se secuestraron varios elementos que acreditaron el crimen, entre ellos un pesado hierro con el que se ultimó a golpes al policía”. Por otra parte, Rodríguez Allende entendió que “si bien el hermano de Duro fue sobreseído, él estuvo en el lugar del hecho. Por ello en su declaración dio datos que fueron importantes, tales como que él antes de retirarse del lugar vio a su hermano peleando con la víctima”. Fuente: Diario UNO