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on el acuerdo suscripto esta tarde en la Casa Rosada por el gobernador Sergio Urribarri y la titular del Banco Nación, Mercedes Marcó del Pont, en un acto encabezado por la presidenta Cristina Fernández, se definió un principio de solución para los más de 400 productores agropecuarios entrerrianos que mantienen deudas con la entidad crediticia nacional desde la década del ‘90. El convenio contempla la inmediata suspensión de los trámites judiciales en curso. En la ceremonia, compartida por representantes del agro entrerriano, la presidenta destacó el acontecimiento y manifestó la importancia de “establecer políticas agropecuarias regionalizadas y federalizadas en forma articulada entre Nación, provincias y municipios”. En tanto, el gobernador aseguró que “esta es una clara señal de que a los gobiernos nacional y provincial les interesa el pequeño y mediano productor mucho más en los hechos que en los discursos”. Cristina frente a frente con chacareros posconflcito Cristina Fernández no ocultó su satisfacción por el acuerdo alcanzado al destacar que “realmente es muy importante lo que acordamos aquí porque soluciona la situación de más de 400 productores entrerrianos y porque se logra mediante la articulación entre Nación y provincia”. Luego aseguró: “Regionalizar y federalizar las políticas agropecuarias y articular los esfuerzos entre Nación, provincias y municipios brindan soluciones eficaces, sobre todo por la diversidad productiva del país”. Manifestó la necesidad de pensar y construir “entre todos y para todos” una Argentina como la que se está construyendo y que hace cinco años era impensado que se pudiera lograr. Luego, dirigiéndose a los productores entrerrianos beneficiados por el acuerdo, destacó la nueva esperanza que ahora poseen. “Yo creo que hoy hemos dado un paso fundamental para que Entre Ríos junto al país pueda lograr junto a los productores un proyecto agrícola, porque necesitamos el esfuerzo de todos para seguir produciendo y construyendo una Argentina que siga agregando valor y generando trabajo para pensar en un futuro exitoso que no está muy lejano”, completó la presidenta. Urribarri también se mostró conciliador Al hacer uso de la palabra, el gobernador Urribarri aseguró que con esta propuesta de acuerdo se podrá resolver definitivamente el histórico problema de los productores agropecuarios de Entre Ríos endeudados con el Banco Nación durante la década del ’90”. “Están aquí presentes productores de varios departamentos entrerrianos que vienen de pasarla mal hace mucho años”, expresó Urribarri antes de recordar el verano de 1996 cuando, como presidente de la Cámara de Diputados, concurrió a una reunión con pequeños y medianos productores de las zonas de Concordia, Villa del Rosario, Chajarí y Federación. “En esa oportunidad, hace 12 años, Hugo Isidro –jefe filial FAA de Concordia- ya hablaba en nombre de muchísimos productores pidiendo que se contemple desde el gobierno una salida que les permita saldar sus deudas”, agregó. El mandatario provincial dijo que es importante “en la realidad y en lo simbólico. Porque, en la realidad a partir de hoy, cientos de productores entrerrianos se sacan la Espada de Damocles que, para algunos de ellos, hace 15 años está amenazando sus propiedades”. Además, Urribarri aseguró: “El gobierno nacional, de la mano de la provincia y con una tarea muy importante de la presidenta y funcionarios del Banco Nación, hemos ido al rescate de cientos de familias de pequeños y medianos productores de Entre Ríos”. Y añadió que se trata de “un gran compromiso porque a partir de ahora estos productores deberán sentarse con su gobierno entrerriano a convenir el repago de sus deudas, en condiciones mucho más favorables”. En este sentido, aseveró que “esta es una clara señal de que a los gobiernos nacional y provincial les interesan los pequeños y medianos productores mucho más que en los discursos, en los hechos”. Luego, el gobernador retomó la expresión anterior y subrayó que hoy es importante en lo simbólico porque “Nación y Provincia se ponen a trabajar con y por los productores pequeños y medianos de Entre Ríos”. Y añadió que el proceso que culmina con la firma de este acuerdo, se inició el 22 de enero pasado en el Salón de los Gobernadores en Paraná cuando se decidió iniciar gestiones ante el Banco Nación. “Y aquí hay otro símbolo y es que ni el gobierno nacional ni el provincial detuvieron sus acciones a pesar de algunas disputas circunstanciales que existen en esta puja distributiva que el estado nacional ha decidido llevar adelante”. Urribarri expresó luego que en este acto hay una “señal de esperanza muy grande” para los productores porque “sus hijos podrán heredar sus propiedades. La naturaleza de sus hipotecas cambian ya que hoy vuelven a ser sujetos de crédito y pueden hacer proyectos”. “Es una alegría tremenda, como pocas viviré en esta gestión de cuatro años como gobernador de la provincia”, aseguró Urribarri. El PJ entrerriano les arruina el acercamiento El Presidente del PJ provincial, José Cáceres, narró los argumentos por los cuales se negó a participar en el salón presidencial, de la firma del convenio entre el gobierno nacional, el Banco Nación, la provincia de Entre Ríos y productores morosos agremiados. "Agradecí la invitación pero no quise participar porque ese acuerdo está muy lejos de ser parte de lo que la doctrina peronista considera justicia social y distribución de la riqueza". La sorpresiva postura de Cáceres se fundamenta en "la coherencia de sostener una posición. Los empresarios que sacan créditos en un banco estatal no deben contribuir a su vaciamiento, porque después nos sorprendemos que algunas teorías liberales tengan eco social cuando hablan de privatizar el patrimonio público". ¿Dónde quedó el concepto federal de los empresarios rurales que ahora le pasan el pasivo de los créditos que no pagan a la provincia?" se preguntó Cáceres. "¿Dónde quedó esa idea de que "no les saquen a los productores"? Acá hay empresarios que quieren privatizar las ganancias y socializar las pérdidas. Quedarse con el aumento del precio internacional de la soja, pero que las deudas con el banco del estado, las pague la provincia. Esto no tiene nada que ver con la justicia social y con la distribución del ingreso" fundamentó Cáceres. "Los bancos del estado no deben condonar deudas a empresarios favorecidos por los altos precios internacionales. Yo no entiendo la lógica de oponerse a una actualización del impuesto inmobiliario rural de la provincia, pero firmar gustosos la estatización provincial de deudas privadas". "Aunque esta es una práctica usual, el antecedente de estatización de deuda pública más conocido es el de Cavallo como presidente del Banco Central durante la dictadura, ese es el inicio de la deuda externa. Ahora, en menor escala, nos quieren hacer firmar lo mismo. Y después piden pagar menos impuestos provinciales, más obras de infraestructura y la Nación nos hizo votar una ley de responsabilidad fiscal de la provincia. No hay ninguna coherencia en esto. Debemos estar por la distribución de la riqueza, por flexibilizar el acceso al crédito de las pymes del campo y la ciudad, pero bajo compromiso de pago, sino el crédito se los quedan los grandes empresarios. Esto está muy lejos de lo que hizo Perón, que nacionalizó la banca, brindó acceso al crédito a pequeñas empresas industriales que trabajen para el mercado interno y a los pequeños empresarios rurales –pero a condición de respetar el estatuto del peón entre otras medidas para los trabajadores- Esa política sirvió para que tengamos pleno empleo, trabajadores en blanco y con altísimos salarios. En cambio, este rumbo del Banco Nación no tiene nada que ver con la justicia social, con el peronismo o con la distribución de la riqueza", finalizó.