E

n 2007, la Coneau había denegado el pedido, a través de la resolución Nº 370, y un nuevo dictamen, de julio último, ratificó los términos de aquella norma al sostener que el recurso de reconsideración presentado por las autoridades de la Uader «no aporta elementos que permitan modificar aquellos aspectos que fueran señalados como deficientes». La Coneau advirtió que el cuerpo docente posee «escasa experiencia en formación de recursos humanos» y también en investigación. Si bien la Uader informó de la trayectoria de cuatro miembros del cuerpo académicos recientemente incorporados, «sólo 3 cumplen con los requisitos para ser docentes de la carrera», señaló la Nación. A ese respecto, el organismo nacional reiteró «la insuficiencia de antecedentes en investigación y formación de recursos humanos del cuerpo académico total, especialmente si se tiene en cuenta el elevado número de alumnos de la carrera», que totalizan 82, y que asisten a la Facultad de Ciencia y Tecnología. La decisión de la Coneau fue «no hacer lugar» al recurso de reconsideración interpuesto por la Uader hacia el texto de la resolución 370, de 2007. Y de ese modo, ratificó «la decisión de hacer lugar a la solicitud de acreditación de la carrera de Maestría en Ecología de la Universidad Autónoma de Entre Ríos, Facultad de Ciencia y Tecnología», que se dicta en Paraná, según especifica la resolución 287. Otro de los argumentos de la Coneau para rechazar la carrera, además del insuficiente nivel académico de los docentes, es lo que considera como «inadecuación del jurado de tesis». A ese respecto, plantea: «Si bien se aclara que en la defensa de una de las tesis hubo miembros externos a la institución, esta exigencia no está debidamente explicitada en la normativa de la carrera». «En la resolución —de 2007, añade el documento— se observaba que de los 82 alumnos informados ninguno se había graduado y que los directores de tesis eran externos a la carrera. En el recurso, se anexan dos tesis y se informa una tercera en curso. Si bien las tesis son correctas, el número de ingresantes es elevado en función de las tesis presentadas. La carrera no cuenta con una masa crítica suficiente como para dirigir tesis». La Coneau también le observó a la Uader sobre «la falta de información sobre la participación de alumnos en los proyectos de investigación y sobre los resultados». Y si bien la Universidad Autónoma, en su recurso de reconsideración ante la Nación, informó de la realización de investigaciones a cargo de los docentes recientemente incorporados, «no es posible evaluar sus resultados; tampoco la participación de alumnos en ellas». «La citada resolución —apunta la Coneau, en relación a la norma dictada en 2007— indicaba la necesidad de desarrollar actividades de transferencia. El recurso no adjunta información al respecto». Así, concluye que luego de haber analizado la información complementaria que presentó la Uader «se puede concluir que no se dispone de elementos de juicio suficientes para modificar lo resuelto en un primer momento». Esa decisión, claro, abre serios interrogantes entre los alumnos que cursan la Maestría en Ecología. Entre éstos, persiste la duda respecto de qué futuro les espera, sobre todo si se tiene en cuenta que la carrera está vigente desde el año 2004 en la Uader. Si bien muchos de los 833 alumnos inscriptos ya finalizaron su carrera, sólo tres elaboraron su tesis. (El Diario)