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ras la polémica por el cambio de hora, sólo en la mitad del país amanecerá más tarde y habrá atardeceres más largos. Con una salida elegante al conflicto que se desató con varios gobernadores cuyanos y patagónicos, el Gobierno dispuso ayer que 12 provincias quedarán exceptuadas de adelantar una hora los relojes. De esta manera, desde la cero hora de mañana la Argentina tendrá dos husos horarios. El decreto 1705 fue publicado en el Boletín Oficial y lleva las firmas de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el jefe de Gabinete, Sergio Massa, el ministro de Planificación, Julio de Vido, y su par de Interior, Florencio Randazzo. Establece que quedan exceptuadas de la modificación horaria las provincias de Catamarca, La Rioja, Mendoza, Salta, San Juan, San Luis, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. La norma indica que, según estudios realizados por la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA), algunas provincias "obtienen ventajas significativas", con el cambio de horario, pero que "en otras no constituye una alternativa". En los últimos días los gobernadores de seis provincias (Salta, Neuquén, Mendoza, San Luis, Catamarca y San Juan) ya habían confirmado que no iban a adelantar la hora. Llamativamente, Jujuy es la única provincia ubicada al Oeste que cambiará la hora. El argumento principal de las que se oponen a modificar los relojes es que la extensión de horas de luz hacia la noche no corresponden con el estilo de vida y costumbres de las provincias y que, incluso, el año pasado mucha gente tuvo problemas para dormir. Expertos en ritmo del sueño y en cronobiología no tardaron en decir que este cambio de hora no es beneficioso para la salud: al reloj biológico le resulta más difícil adelantarse que retrasarse. Lo cierto es que, salvo las 12 provincias exceptuadas por el decreto, a partir del primer minuto de este domingo el resto del país tiene una nueva hora. Se mantendrá hasta el 15 de marzo de 2009, y ese día habrá que retrasar los relojes. Así, una parte del país (11 provincias y la Ciudad de Buenos Aires) transitará el verano en el huso horario 2 (al Oeste del meridiano Greenwich) y retornará al huso 3 en el otoño. La otra mitad (compuesta por las 12 provincias exceptuadas) seguirá sin cambios en el huso horario 3.