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��Siempre que hay pérdidas el Estado debe hacerse cargo de todo, incluso en aquellos sectores donde nos decían que el mercado y su derrame lo resolverían todo", dijo Cristina y calificó como una “decisión estratégica” el decreto que da por terminado el sistema de capitalización.
"Un sistema que constituye un despojo y una clausura a todo lo que ha sido la base del sistema previsional en todo el mundo: la solidaridad", dijo la Presidenta en el acto en el que el Gobierno prometió que el Estado Nacional absorberá a los 11 mil trabajadores de las Administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones (Afjp) que se quedarán sin trabajo por la estatización del sistema de jubilación privada.
Antes del discurso de Cristina, el titular de la Anses, Amado Boudou, calificó de “experimento fracasado” al sistema de capitalización, y aseguró que “miles de afiliados” de las Afjp “dependen del pago que les hace el Estado”.
Boudou aseguró que el Sistema Integrado Previsional Argentino (Sipa) "va a reconocer" a las personas que aportaron a una Afjp "el mismo monto" que si hubieran aportado al sistema de reparto.
"Nuestro nuevo sistema va a reconocer a aquellas personas que están aportando a una Afjp el mismo monto que si hubieran estado aportando al sistema de reparto", anunció el titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
En referencia a las críticas de Elisa Carrió, Boudou dijo que el “verdadero saqueo” fue transferir el “ahorro previsional” a los privados, que “le costó muy caro a la sociedad”: "Nos endeudamos en 100.000 millones de dólares adicionales, que sin ese saqueo no hubiese ocurrido".
El acto se desarrolló en la sede de la Anses con la presencia todo el Gabinete nacional, legisladores, sindicalistas y gobernadores, entre los cuales figuran Sergio Urribarri, José Alperovich, Celso Jaque, Jorge Sagag, Gildo Insfrán y Daniel Scioli, entre otros.
Claves para entender el traspaso
Los afiliados a las Afjp: pasarán al Estado, incluidos los fondos acumulados en sus cuentas individuales. A cambio, el Estado les reconocerá los meses y años de aportes hechos a las administradoras privadas como si hubiesen sido al Estado. Esto significa que al momento de jubilarse, la Anses calculará el haber mensual según las reglas del sistema público.
Cómo calcularán la jubilación en el Estado: en el sistema público, el trabajador tiene derecho a cobrar la Prestación Básica Universal (hoy de $326 mensuales) más el 1,5% del sueldo promedio actualizado de los últimos 10 años por cada año aportado. Un ejemplo: con 30 años de aportes y con un sueldo actualizado de los últimos 120 meses anteriores al retiro jubilatorio de $2.000, la jubilación sería de $1.226 ($326 más el 45% de $2.000). Esa jubilación se actualiza luego dos veces por años de acuerdo a la fórmula de movilidad aprobada días atrás por el Congreso.
Puede un afiliado a una Afjp resistirse a ser transferido al Estado: la eliminación del sistema privado de jubilaciones tiene que ser aplicado mediante una ley del Congreso. Si esto se sanciona como lo prevé el Gobierno, la transferencia será automática. De todas maneras, siempre está abierta la posibilidad de presentar un recurso de amparo invocando la pérdida de derechos. En ese caso la palabra final la tendría la Corte Suprema de Justicia.
Cómo se calcula el haber en el sistema privado: con 30 años de aportes, el trabajador también tiene derecho a la Prestación Básica Universal (PBU) de $326 y el resto depende los aportes efectuados y de la rentabilidad que obtuvo la Afjp con la inversión de los fondos. Los especialistas estiman que por la actual caída de la rentabilidad, en la actualidad el haber público sería superior al del régimen privado. Pero los resultados podrían variar según los comportamiento del mercado financiero.
Cuál es la situación de los que ya se jubilaron por una Afjp: si están cobrando un "retiro programado" a través de una Afjp, el Estado les pagará la mejor renta que hayan cobrado durante este año. Ese haber se ajustará en adelante según la fórmula de movilidad. En cambio, si cobra una renta vitalicia a través de una compañía de seguros seguirá cobrando lo que arroje el cálculo privado, porque se trata de un contrato de por vida.
Qué ocurrirá con los fondos acumulados por los afiliados al sistema privado: estos fondos suman alrededor de $97.000 millones y pasarán al Estado, con el compromiso de retenerlos en la cartera de la Anses como garantía de solvencia del régimen público. También a la espera de una recuperación de las cotizaciones o conservándolos hasta su vencimiento. Más de la mitad de esos fondos son bonos públicos; por lo que la deuda pública neta se reducirá, pero aumentará la llamada deuda implícita porque el Estado asume el compromiso de pagar las jubilaciones futuras de toda la gente transferida.
Se contará con más plata para financiar el pago de la deuda pública: el aporte jubilatorio de los afiliados transferidos se mantendrá sin cambios, pero en lugar de ir a las Afjp pasarán a la Anses. Son alrededor de $15.000 millones anuales. Esto mejora los ingresos fiscales e incrementa el superávit fiscal primario (antes del pago de los intereses). Además, le permitirá al Tesoro financiar el pago de la deuda pública, tomando plata de la Anses a cambio de Letras, como está pasando actualmente también con otros organismos públicos, como la Afip. Cabe recordar que el año pasado la Anses recibió los fondos de una parte de los afiliados a las Afjp que se transfirieron obligatoriamente. Actualmente, la Anses tiene colocados $6.350 millones en Letras de Tesorería a tasas que rondan entre el 8,5% y 11,8% anual.
Los afiliados a las Afjp son cerca de 5 millones de personas y los del Estado son 3,5 millones, en un negocio que fue concentrándose ya que el número de empresas se redujo a la mitad: de 26 originales hoy sólo hay diez compañías, de las cuales las tres más importantes concentran el 50% de los afiliados.
El traspaso incluirá la transferencia al Estado de los fondos acumulados por los afiliados en sus cuentas personales y que fueron invertidos por las Afjp. Esos fondos suman cerca de $97.000 millones.
Según un documento oficial, el Gobierno fue alertado de que al 77% de los 446 mil jubilados cuyos haberes son responsabilidad de las Afjp, los termina pagando el Estado.
En el mismo informe aseguran que 33 mil personas que integran el sector pasivo y que están afiliadas a las Afjp reciben el total de su haber del Estado, debido a que sus aportes ya no existen más; 220 mil reciben la mitad; y para otras 100 mil una parte del haber es estatal; apenas 23%, es decir, 103 mil jubilados cobran todo su haber de la Afjp.
Urribarri avaló el anuncio
El gobernador Sergio Urribarri afirmó que “el gobierno actúa en protección de los intereses presentes y futuros de más de nueve millones de ciudadanos; El sistema de jubilaciones privadas fracasó porque está expuesto a situaciones como las que estamos viviendo y otros avatares”; Lo dijo luego de participar del acto en que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el proyecto de creación del Sistema Integrado Previsional Argentino.
“Creo que la decisión del gobierno es correcta y que la instrumentación de las medidas tenderá a proteger ese ahorro nacional en lugar de exponerlos a la especulación y al mismo tiempo promover la dinamización de la economía del país. Será una medida muy beneficiosa, aún cuando esos resultados se verán en el largo plazo”, afirmó el primer mandatario.
Tras la novedad que formalizó la jefa de Estado en la sede del Anses – como lugar simbólico del patrimonio de los jubilados del país – Urribarri señaló: “Uno no conoce los detalles, pero es de suponer que es una medida que tiene una estructura que la soporte. La preservación de los fondos previsionales representan un compromiso generacional, de esta generación con la generación que viene y por eso la decisión conlleva una enorme responsabilidad institucional”.
Dicho esto, el gobernador entrerriano sostuvo: “No soy partidario de hacer análisis ideológicos en estos temas porque nos encaminaríamos hacia una discusión subjetiva y opinable. En cambio esta es una decisión política de proteger el ahorro nacional y de volver a un sistema solidario e intergeneracional de jubilaciones que es una creación peronista”.
En un acto que contó con la presencia de gobernadores, funcionarios y legisladores nacionales, representantes de diversas entidades sindicales y entidades civiles, además de referentes de organizaciones de jubilados, se puso de relieve que la motivación del proyecto que el Poder Ejecutivo Nacional presentó al Congreso rescatar de la incertidumbre y la imprevisión social a futuros jubilados y actuales pasivos, y proteger los ahorros de los trabajadores.
“Es una decisión de las más delicadas que ha tomado la Presidenta y desde Entre Ríos la apoyamos con fuerza. Ella y sus funcionarios han tomado en cuenta todos los aspectos legales de tal manera que el retiro de los jubilados del futuro estará más protegidos y el ahorro nacional apalancando el desarrollo del país”, refirió el primer mandatario en declaraciones a la prensa.
Según se anticipó, la iniciativa apunta a resguardar las jubilaciones, fundamentalmente en un contexto internacional incierto, y en este sentido se apunta hacia un sistema jubilatorio de mayor calidad institucional para los trabajadores argentinos. Fue en este marco que el titular del organismo previsional argentino, Amado Boudou, anunció que el proyecto elevado al Congreso incluye la creación de una comisión bicameral de seguimiento de la seguridad social.
