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l Consejo General de Educación (CGE) está rastreando la existencia de una serie de videos que contienen escenas de sexo, protagonizados por alumnos de escuelas secundarias de la ciudad. Las filmaciones habrían sido hechas con teléfonos celulares, cuyo uso se ha masificado en los colegios de Entre Ríos, a pesar de los esfuerzos de las autoridades por prohibirlos. Los videos serían de características similares al que a fines de septiembre último tuvo como protagonistas a dos adolescentes que asisten a la Escuela Técnica Nº 3 Luis Cenobio Candelaria, que funciona en instalaciones de la II Brigada Aérea, en Paraná. Y de acuerdo a lo que trascendió, serían parte de una “movida” en ocasión del último festejo por el Día del Estudiante. Aunque hasta ahora las autoridades sólo pudieron comprobar la existencia del video de la Escuela Técnica Nº 3. A raíz de ese hecho, los alumnos fueron sancionados y se les aplicaron 24 amonestaciones y media, al borde de la expulsión. En el video se observa a la chica, de 14 años, mientras practica sexo oral a su compañero, de 15, escena filmada en los sanitarios de la estación de servicios ubicada frente al establecimiento escolar, en avenida Jorge Newbery y ruta 12. La reprimenda se impuso por haber usado el uniforme escolar en una escena de sexo, algo que prohíbe el código de convivencia de la escuela. Además, ambos deberán reubicarse en otra escuela a partir del ciclo lectivo 2009. No fue, claro, el único caso: en octubre de 2007 un hecho similar fue descubierto en la Escuela Privada Santa Ana. Otra Vez De aquel video de los dos adolescentes de la Escuela Técnica Nº 3 se tuvo conocimiento el lunes 22 de septiembre, luego del festejo del Día del Estudiante, cuando circuló masivamente mediante el sistema de blue tooth, un mecanismo de transmisión de dato entre un celular y otro. Pero ahora está la presunción de que aquel no sería el único, sino que habría más videos circulando entre un celular y otro. “No tengo datos concretos respecto de dónde se filmaron, ni en qué circunstancias. Pero esa es la información que yo tengo: habría más videos. Tampoco estoy seguro si fue en una escuela. No hay datos precisos, como sí había en el caso de la escuela de la Base”, admitió Roberto Matteoda, supervisor departamental de Educación de Paraná. Como fuere, Matteoda no ocultó su preocupación por ese tipo de hechos. “La reflexión que hago, por un lado, es que este tipo de hechos nos preocupan; y además, más allá que se trate de hechos que tienen que ver con la intimidad, entendemos que los padres deben intervenir si están al tanto de que esto sucede con sus hijos”, señaló. “Educar en el respeto del cuerpo, de los valores, respetar la privacidad, es función de la familia, y la escuela es solamente un complemento en esa tarea”, agregó. Por eso, dijo, el camino no puede ser “sancionar a los alumnos” que participaron, porque no se ha podido individualizar, a pesar de que las averiguaciones ya están en marcha. “El caso de la Escuela Técnica Nº 3 fue muy particular, porque en el video se vio a los alumnos con el uniforme de la escuela. Ahora, en cambio, el caso no amerita la sanción sino la charla y la concientización. Ya desde el Consejo el tema se está abordando a partir de la inclusión de la temática de la educación sexual”, abundó. Qué hacer con el uso de celulares El uso de celulares entre los alumnos en la escuela, en este caso para filmaciones de relaciones sexuales entre adolescentes, pone otra vez en discusión la utilización de ese tipo de tecnología en el aula, e incluso sobre la eventual prohibición. “No hay normativa que prohíba el uso del celular —dice Matteoda—. El celular es un elemento de uso privado, de cada uno, y hay que tener mucho cuidado en su reglamentación. Lo ideal sería que el chico pueda llevar el celular a la escuela, pero que al ingresar al aula, lo deposite en la dirección, y a la salida, lo retire. Aunque también sé que es un elemento que sirve a los padres para estar comunicados con sus hijos, por una cuestión de seguridad”. Adriana Wendler, responsable del Programa Convivencia Escolar del Consejo de Educación, dice que permitir o no el uso del teléfono celular en la escuela es potestad de cada institución, en los acuerdos de convivencia. “Cada escuela tiene la autonomía para resolverlo. Así, en algunos casos permiten prenderlos sólo en los recreos; en, se los permiten todo el tiempo, pero en tono bajo; y también están las escuelas que directamente los prohíben. Pero es algo que cada institución decide”, afirma. Hay, sin embargo, una circular, la Nº 15 del Consejo de Educación, del año 2005, que se hace eco de una resolución de la Cámara de Diputados, que impulsó el entonces diputado justicialista Juan José Bahillo, y que recomendó al Estado vedar el uso de celulares en clase. Claro que el asunto del uso de la telefonía móvil no es exclusiva de los alumnos: tampoco los docentes pueden desligarse en clase de hacer y contestar llamadas, o enviar y recibir mensajes de texto. (Fuente: El Diario)