P
arece que el gobierno entrerriano deberá pensar bien a la hora de sumar funcionarios a su staff “y no lo decimos por una cuestión monetaria”, se confió a RUMORES, sino “por una cuestión de espacio”. Sucede que desde el 20 de agosto del 2008, Héctor Tito Alanís, el hombre que acompaña a cada acto al interior de la provincia al gobernador, “no tiene una oficina donde realizar sus tareas de funcionario”, se alcahueteó a RUMORES. Al parecer “Tito” espera con sus muebles en la puerta de la Subsecretaria de Derechos Humanos a que le den un lugarcito, algo que deberá seguir esperando ya que la “Pepa Minatta no se quiere ir a Transporte allá en calle Ascuénaga de Paraná”, aseguran hombres muy cercanos al subsecretario de DD.HH.. “Que sigan trayendo cartas nomás”, habría dicho “la Pepa” quién viene aguantando el desalojo hace meses. Las cartas a las que se refiere Minatta son las que le manda Arquitectura de la Provincia - encargada de definir a quién le toca cada espacio a los funcionarios – para que se mude. Parece que ya han visto hasta al propio Alanis oficiar de “chasqui” llevando cartas para acelerar el proceso de mudanza.