L
a adolescente de 13 años salía de la escuela y mientras esperaba el colectivo, fue interceptada por tres niñas de entre 13 y 15 años que directamente la agredieron a trompadas y patadas. En la acción le sustrajeron algunos anillos y a causa de las lesiones debió ser internada en observación en el hospital San Roque. Se supo que el miércoles, el padre de la menor lesionada, habría tenido una discusión con el hermano de una de las chicas que agredió a la alumna y a modo de venganza, saldaron el primer hecho, esperándola y golpeándola. Además, se informó al personal de la comisaría cuarta que intervino en el hecho, que la lesionada y una de las agresoras podrían tener diferencias por la amistad de un adolescente. Este es un nuevo hecho de violencia que se suma a otros que han ocurrido incluso en escuelas del radio céntrico de Paraná, poniendo de manifiesto el nivel de agresividad existente en ámbitos escolares, cosa que ya no es privativo solamente de los varones, sino que también las chicas, no solo arengan las peleas cada vez que se producen, sino que ahora también participan de ellas. Desde el año pasado se ha escuchado hablar de agresiones entre chicas y una de las mas recordadas fue aquella adolescente a la que quisieron desfigurar con un arma blanca, por el solo hecho de que cuidaba su aspecto y era mas bonita que las que se unieron para castigarla. Hace algunas semanas, un chico de la Escuela Normal José María Torres debió ser internado tras sufrir una descompensación, luego de que otro alumno lo tomara por el cuello y lo elevara en el aire, castigándolo por cuestiones de adolescentes, sin que personal docente o no docente pudiera actuar con inmediatez. En esa misma institución escolar, una vicedirectora acusó al padre de una alumna de haberla “zamarreado”, -cosa que el hombre se encargó de negar- como corolario de una discusión que había comenzado con la esposa del denunciado, lo que generó una inmediata reacción del gremio docente.