E
l Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (Iafas) decidirá antes de fin de año si cierra definitivamente la sala del bingo de Paraná debido al fuerte déficit que arrastra. No será la única sala que podría tener ese futuro. En la mira también están las salas de juegos de localidades chicas que no consiguen remontar el interés de los apostadores, y languidecen. Entre éstas, están las de Viale, Santa Elena y Feliciano, lugares donde, según el titular del Iafas, José Spinelli, con lo que se recauda “ni siquiera se llegan a cubrir los gastos fijos”. Y aclaró que los 15 empleados que tiene, si es que se resuelve el cierre, serán redistribuidos. “La decisión tiene que tomarse este año. O se revierte el déficit, o habrá que resolver el cierre. No podemos seguir con una sala que tiene muy pocos apostadores, porque sería perjudicial para el Instituto”, destacó. Desinterés El funcionario dijo que “hay muchas salas que resultan deficitarias”, aunque reconoció que la situación no es de ahora, pero afirmó que se están tomando “medidas correctivas” a los fines de evitar que el déficit complique las finanzas del Iafas. Entre esas salas, está en bingo de Paraná, el cual tiene los días contados si no logra revertir ese panorama. “Se están tomando medidas correctivas a efectos de tornarlas lo menos deficitarias posible, y matenerlas abiertas. Pero si esas medidas correctivas no sirven, el paso que sigue es cerrar esas salas”, señaló. —¿Qué tan deficitario es el bingo de Paraná? —Es el único bingo que tiene el Iafas. Se están tomando medidas porque hace rato que viene con esta situación de altamente deficitario. Es una pérdida considerable la que se arrastra: se recauda muy poco, es ínfimo. En este último tiempo, lo que se recauda alcanza prácticamente sólo para pagar el servicio de seguridad y para la luz, nada más. —¿No se alcanza a pagar el sueldo de los empleados? —Ni empleados ni cargas sociales. Por eso estamos procurando aplicar medidas correctivas, buscarle algunas variantes al juego para hacerlo más atractivo, como podría ser incrementar los pozos, dar algunos premios extra. Pero son las últimas medidas que podemos como funcionarios adoptar. Si no funcionan esas medidas, habrá que cerrarlo, y el personal destinarlo a otras salas, dentro de la misma ciudad. —¿Cuánto pierde? —La pérdida mensual del bingo en este momento supera los 100 mil pesos. Competencia De todos modos, Spinelli señaló que no es la única ciudad comprometida en materia de juego. “Hay varias salitas, sobre todo las más chicas, que resultan deficitarias, como por ejemplo Viale, Feliciano o Santa Elena. Son salas deficitarias, e incluso la cantidad de máquinas que tienen funcionando no alcanzan para recaudar para los gastos fijos”, apuntó. En ese escenario, señaló que la competencia del juego en Santa Fe está afectando la recaudación de las salas en Entre Ríos: el casino de Santa Fe ya consiguió opacar la realidad de Paraná, y la pronta inauguración de una sala similar en Rosario podría quitarle apostadores al casino estrella en la provincia, el de Victoria, cuya mayor demanda proviene de la vecina provincia. “Seguramente que la inauguración del casino de Rosario lo va a afectar. Hemos implementado algunas medidas, y estamos dándole mucho impulso al casino del Mayorazgo, en Paraná, y un impulso a los casinos de la costa del río Uruguay. Además, vamos a adoptar medidas referentes al casino de Victoria, para seguir manteniéndolo como una plaza atractiva”, anunció. La misma preocupación había plantado esta semana el funcionario durante una visita a Victoria. Al hablar sobre la sala de juegos rosarina, indicó que “esperamos que provoque la menor incidencia posible, aunque por los estudios realizados habrá un impacto y no podemos dimensionar por cuánto tiempo. Partimos de la base que Rosario aporta una cantidad importante de público al casino de Victoria. Estamos estudiando todas las alternativas y con capacidad de empleados y funcionarios vamos a desarrollar acciones para que esa gente siga viniendo”. (Fuente: El Diario)