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ara el próximo mes se anuncia la puesta en marcha de una planta de recuperación y transferencia de residuos inorgánicos en un sector aledaño al Volcadero municipal, donde diariamente van a parar unas 300 toneladas de basura de la ciudad. El inicio del trabajo de esta planta está ligado al relanzamiento de la separación en origen de residuos urbanos domiciliarios, modalidad que el Gobierno implementará en septiembre en la zona sur donde operó –a modo de prueba piloto- durante la gestión pasada y fue quedando desactivada a fines de 2007. Con la recolección diferenciada funcionando, se espera que a la planta llegue sólo la basura inorgánica (papel, cartón, vidrio y plástico), materiales que a la vez serán separados entre aquellos que son reciclables y los que no. A los primeros se los someterá a un proceso de selección, empaque y almacenamiento, mientras que el resto será transferido al lugar de disposición final (hasta ahora el Volcadero). En eso trabajarán 30 familias de cartoneros, número que se irá incrementando a medida que se sumen sectores de la ciudad a la separación de residuos (orgánicos e inorgánicos). La planta de reciclaje se trata de una experiencia encarada en forma conjunta por la Facultad de Trabajo Social, dependiente de la Universidad de Entre Ríos (UNER), y la Municipalidad de Paraná. Cabe recordar que la Comuna y la Casa de altos estudios firmaron un convenio para abordar en forma conjunta el tema de la basura de la ciudad. Lo hicieron el año pasado en el marco del proyecto de instalación de una planta de tratamientos de residuos. La concreción de esa iniciativa quedó en veremos (Ver Recuadro) y en el camino fueron apareciendo estos otros emprendimientos: la clasificación de residuos domiciliarios y la instalación de esta otra planta, más pequeña y con matiz asociativo. Precisiones El Secretario de Medio Ambiente de la Municipalidad de Paraná, Ricardo Goñi, informó que este martes trabajó en conjunto con la Secretaria de Gobierno, Rosario Romero, en la elaboración de un decreto para el llamado a licitación para la adquisición del equipamiento básico para la planta de recuperación y transferencia de residuos inorgánicos. El funcionario destacó que se trata de una tarea conjunta con la Facultad de Trabajo Social, institución que hace años viene trabajando con cirujas del Volcadero. La Casa –dijo- está abocada a la capacitación y al acompañamiento en la definición de formas organizativas de la gente con “el fin de mejorar las condiciones sanitarias y de trabajo y procurar también mejores condiciones de mercado para la comercialización de los productos (reciclados)”. Para avanzar en esa organización, la Comuna resolvió ceder un galpón de la ex Dirección de Limpieza (repartición disuelta hace un par de meses) y dotar del equipamiento el comienzo de esta primer experiencia, explicó el secretario. Entre los elementos necesarios, se mencionó una compactadora o enfardadora de plásticos, una balanza, entre otros. Goñi remarcó que el galpón hará las veces de “silo”, pues se podrá acopiar el material, cuestión que generalmente no pueden hacer los cartoneros debido a la carencia de espacio. Organización Griselda Anzola, docente e investigadora de la Facultad de Trabajo Social informó que desde esa Casa trabaja con gente del Volcadero en la conformación de un grupo asociativo, cuya figura jurídica aún no está definida, para abordar la experiencia. Enmarcó el proyecto en la tarea que viene desarrollando una mesa conformada por las áreas de Medio Ambiente y Desarrollo Social del Municipio, una organización no gubernamental Eco Urbano y con la Facultad. Desde es ámbito se abordó la aplicación del sistema de separación en origen de los residuos húmedos y secos. En abril pasado, el Gobierno promulgó una ordenanza que establece la instrumentación de la separación en origen de residuos. En cuanto al funcionamiento de la planta de recuperación, Anzola explicó que llegará el material inorgánico, los trabajadores lo seleccionarán y lo enfardarán. En tanto, la Facultad se aboca a la búsqueda del circuito de comercialización. “Hasta el momento, los trabajadores hacen la selección en el Volcadero, a cielo abierto, con todo mezclado (orgánico e inorgánico; ahora, en vez de venderles a los acopiadores de la zona, podrán ellos mismos comercializarlo con un valor agregado )dado por la selección y el empaque)”, explicó. (Fuente: El Diario)