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a justicia riojana confirmó este martes en base a los resultados de una autopsia que la niña sepultada el domingo por su madre en Villa Castelli "nació por parto natural y estaba viva" cuando el domingo pasado fue asfixiada con una bolsa de nylon y enterrada por su madre en un descampado de esa localidad precordillerana. La madre de la niña, Catalina Rojo, de 29 años, permanece detenida en la comisaría de Villa Unión, y fue dada de alta en las últimas horas del hospital zonal, donde fue llevada para recuperarse del parto. La autopsia determinó que "la bebé nació a término, mediante un parto natural, estaba saludable y murió producto de la asfixia del enterramiento", precisó la jueza Graciela Páez de Echeverría a radio Fénix. Los forenses estimaron que la beba murió entre "siete u ocho horas" antes de ser encontrada por la policía, luego de que Rojo confesara el crimen. La justicia investiga si la mujer dio a luz sola o si recibió la ayuda de otra persona. El padre de la mujer detenida, Francisco Rojo, dijo "no entender" las razones que llevaron a su hija a actuar de esa manera. La médica que hacía el seguimiento del embarazo, Rita De la Fuente, reconoció dijo que "nunca" imaginó que su paciente tomaría tal actitud y que tampoco pudo observar "alteraciones psíquicas" en ella. También contó que en varias oportunidades le había planteado a Rojo la posibilidad de "entregar a la bebé en adopción si ella no podía criarla". Según fuentes policiales, Catalina Rojo tiene otros dos hijos, iba a la escuela nocturna y vivía con su padre y dos hermanos. La causa fue caratulada por la jueza Páez de Echeverríacomo "homicidio agravado por el vínculo".