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l poder político lo “recalentó” el hecho de que desde tribunales los empezaron a llamar a indagatoria por el “desacato” de no haber obedecido la “orden” judicial de designar jueces. Se trata de la causa que investiga si ex senadores cometieron un delito al no cumplir la orden que prohibía la aprobación de los pliegos del concurso 25. Los ex legisladores serán indagados por el delito de desobediencia judicial, previsto y penado en el artículo 239 del Código Penal. Lo cierto es que los legisladores y ex legisladores implicados sostienen que “es una cuestión política no judiciable”, pero como algunos sospecharían que "la orden de pintarle los dedos" vendría desde el STJ y la Procuración General, estarían dispuestos a empezar a “hacer políticas cuestiones judiciales”. Es así que a RUMORES se aseguró que “el barro va a empezar por importantes gastos en viáticos de algunos también importantes hombres y mujeres del poder judicial”, pero después seguirían por “las novias nuevas y secretarias”, “los parientes designados a dedo” y a hasta “llegar a tomar en cuenta algún que otro pedido de juicio político al STJ que anda dando vuelta en la legislatura”.