E

l hecho El brutal homicidio se produjo en una casa de calle Celia Torrá 324, del barrio San Vicente, propiedad de Carlos Roberto Videla de 66 años, suboficial mayor retirado del Ejército, quien fuera integrante de la Banda del Batallón de Ingenieros. Al parecer, la víctima fue sorprendida la noche del martes por él o los homicidas, algo que era materia de investigación policial, trascendiendo que quien sería sindicado como el autor del crimen, conocía a la víctima y concurría a la casa. Videla fue asesinado durante la madrugada y al parecer el ladrón se retiró de la casa dejando el cadáver en el fondo, para regresar en la mañana de este miércoles con su pareja. Con la excusa de que el dueño le había dado la vivienda y se había ido para no regresar, el asesino comenzó a retirar los muebles, pero esto fue observado por un conocido de Videla que pasó por el lugar y al ver tal situación dio aviso a la Policía. Inmediatamente de notificados de lo que pasaba, personal policial se dirigió al domicilio, situación que puso en fuga al sospechoso que habría escapado por los fondos. El hallazgo Los uniformados entraron a la casa, donde se observaba que faltaban muebles o que al menos estos habían sido retirados a otras habitaciones, como dando lugar para una mudanza, recorriendo las instalaciones se encontraron elementos dispersos y en el fondo del terreno, se halló el cuerpo de Videla, tirado en el piso, con evidencias de haber sido golpeado brutalmente en la cabeza. La novedad fue notificada a la jueza María Cristina Calveyra, responsable del juzgado de Instrucción Nº 1, que llegó al lugar inmediatamente, siendo acompañada por su secretaria y el subjefe de la Departamental policial, comisario inspector Marcelo Favre. La magistrada observó las diligencias de los peritos de Criminalística en el escenario de los hechos, que fue preservado de manera de no alterar los elementos, al tiempo que se procedía a la detención de una joven de unos 17 años y un muchacho de unos 25 años, pareja y cuñado, respectivamente, de quien está sospechado de ser el homicida. Calveyra confirmó que se estaba ante un caso de homicidio de violentas características y señaló que las dos personas detenidas serían llevadas a Tribunales para declarar, en tanto que ya se había librado la orden de detención del presunto asesino, de quien no quiso dar datos filiatorios. Traslado Las diligencias del personal especializado, llevaron al secuestro de elementos de importancia al caso, trascendiendo que entre estos se hallaría una maza encontrada en el fondo de la casa, la que sería sometida a peritajes. Por otra parte se supo que en el lugar encontraron una pala y un machete, al tiempo que descubrieron que el auto de la víctima que estaba en el garaje tenía reclinado uno de los asientos, por lo que se presume que el delincuente podría haber planeado deshacerse del cuerpo. Finalizadas las pericias, la jueza ordenó el traslado del cadáver a la morgue del hospital Justo José de Urquiza, donde en horas de la tarde se le practicó la autopsia correspondiente, constatándose que el cuerpo presentaba más de veinte puntazos, la mayoría en el pecho, pero que al parecer no fueron vitales y un brutal golpe en la cabeza en la zona derecha posterior del parietal, que le produjo tremendas fracturas y la muerte. Antecedentes El crimen de Carlos Roberto Videla hizo recordar al ocurrido el 9 de marzo de 2007 en el domicilio de Santa Teresita y 14 de Julio, donde malvivientes golpearon brutalmente a Ramón Antonio Iuraca, un pensionado de 54 años de edad, a quien dieron muerte y dejaron maniatado en una cama, caso por el cual hay varios detenidos. Un día más tarde, en una vivienda de 20 del Oeste, casi Santa Teresita, una pareja mató salvajemente a hachazos a Nélida Charriere de Voilloud, una jubilada de 74 años, cuyos autores fueron condenados. A estos se suman los ocurridos el 24 y 29 de diciembre de 2005, donde Julio Pivas de 54 años fue muerto de más de 20 puñaladas y Luís María Saturnino Blather de 71 años de edad, asesinado de 9 puñaladas, casos que también tienen a sus responsables condenados. (Fuente: Diario Uno)