E
l secretario de Desarrollo Social de la Municipalidad de Paraná, Walter Carballo, informó que desde la Comuna, en forma conjunta con Prefectura Naval, se recorre permanentemente la costa en virtud de la crecida del Río Paraná. El funconario indicó que “el pasado 30 de diciembre se realizó un recorrido desde Toma Nueva hasta Bajada Grande (jurisdicción de Paraná), y no se observó ninguna situación critica". Asimismo reconoció que existe un grupo de pescadores que tienen en estos lugares de referencia sus ranchadas donde guardan sus elementos de pesca, por lo que "las han corrido a medida que crece el río, por cuanto ellos no quieren abandonar el sitio que tienen como un lugar de trabajo; pero esas familias tienen sus residencias dentro de la ciudad, por lo que no se puede hablar de evacuación o autoevacuación”, referenció. “Me llama la atención que a través de un medio local se hable de 30 familias autoevacuadas. No sé de quien se trata, porque personalmente me puse en contacto con el presidente de la comisión vecinal de Bajada Grande, que podría ser la zona más critica, y esencialmente le puedo decir que no tenemos conocimiento de familias evacuadas. Cuando recorrí el río Paraná estaba en 5 metros y ahora creció 3 cm., por lo que la situación no ha variado considerablemente como para que nosotros nos podamos sorprender con una situación que no haya estado prevista”, consideró. El Secretario de Desarrollo Social municipal indicó que hay un patrullaje permanente por parte de Prefectura y de la Municipalidad, "por lo que me resulta extraño que a cinco días de que hayamos recorrido la costa, y ayudado a esos ribereños con bolsones de alimentos, nylon y otros elementos, aparezca una noticia de este tipo. No hay otro registro de una situación crítica, de familias que estén damnificadas en su vivienda permanente por la crecida del río”, reiteró. “Desde Desarrollo Social, Turismo y Defensa Civil municipal y provincial, conjuntamente con Prefectura estamos monitoreando el comportamiento del río, frente a las playas y la Costanera baja, es decir estamos todos en alerta”, sentenció. “Nuestros teléfonos están abiertos en todo momento, es más, el día 1 de enero, como llovió, estuve permanentemente en alerta porque cuando se da esta situación se complica con algunos arroyos, por lo que dejo aclarado que la comunicación de nuestra parte es fluida y responsable”, remarcó finalmente.