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uis Marín, jefe de Tránsito, dijo que los controles se retomarán el mañana, cuando se espera que los titulares vayan retirando sus rodados. Entre el miércoles y el sábado por la noche, la Comuna de Paraná retuvo 244 motos, cantidad que sumada a los vehículos existentes en los depósitos elevó el número total a 380. Es que, según informó Luis Marín, jefe de la Sección de Tránsito de la Municipalidad, el viernes y sábado se realizaron operativos nocturnos, los que arrojaron el traslado de unos 90 motovehículos. Con esa perfomance, en las últimas horas del sábado ya se volvía dificultoso la descarga y ubicación de las motos en los locales municipales. “Están abarrotados” los depósitos, explicó el funcionario, quien dijo que en vista de ese panorama se decidió suspender los controles previstos para este domingo y retomarlos este martes por la tarde, cuando se espera que haya una descongestión de vehículos tras el retiro gestionado por sus titulares. Seguidamente, añadió que la mayoría (un 90%) de las retenciones se debe a la falta de casco o del uso adecuado del protector. Llenos “Estamos llegando a una cifra importante”, dijo Luis Marín en referencia al resultado de los últimos operativos. Recordó, a continuación, que los controles son nocturnos los viernes y los sábados, mientras que los domingos se realizan por la tarde. En tanto, también se desarrollan durante los demás días de la semana. La Comuna dispone de dos depósitos para dejar las motos: uno en calle El Paracao 32 y otro en San Martín 27. Tras los últimos operativos, el número de vehículos incautados creció y la capacidad quedó colmada. Así las cosas, el funcionario no descartó la posibilidad de que se habilite otro local. “Remanente” De las 380, unas 60 permanecen desde que se iniciaron los operativos, en la segunda quincena de octubre pasado. Sucede que los titulares, para poder retirar su vehículo, deben cumplir con una serie de requisitos solicitado por el Juzgado de Faltas, además de pagar la multa, el traslado y la estadía. Se trata de un “remanente”, dijo Marín y explicó que para poder retirar las motos, los conductores deben cumplir con cinco requisitos: el título del vehículo, el patentamiento, el carné en la categoría correspondiente, el seguro contra terceros y el casco de uso obligatorio. Y resta una sexta exigencia: el dinero para abonar la multa (150 pesos, si la infracción es por la falta de casco), el traslado (60 pesos) y la estadía (10 pesos por cada 24 horas). Por el seguro El funcionario municipal anunció que en la primera quincena de febrero, los controles pondrán énfasis en la exigencia del seguro obligatorio contra terceros. Es que, entre otros elementos, los operativos vienen dando cuenta que es bajísimo el índice de motociclistas que circula con esa cobertura fijada por ley. Paralelamente, se prevén instrumentar controles en automovilistas. Al respecto, Marín reiteró que una de las exigencias de los inspecciones será el uso de cinturón de seguridad.