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a cantidad de obras en altura crece vertiginosamente en Paraná. Actualmente, 40 construcciones de esas características están siendo ejecutadas en la ciudad, en tanto que alrededor de 200 obras se encuentran en diferentes etapas de desarrollo. Cuando esas tareas no están correctamente certificadas se pone en riesgo la integridad física y material de los obreros, pero también de los vecinos lindantes. De hecho, en sólo 15 días se produjeron dos derrumbes que, por milagro, provocaron únicamente pérdidas materiales. Esos acontecimientos desataron la preocupación de muchas personas que se sienten en riesgo por los constantes movimientos de tierra que llevan a cabo para avanzar en la labor. A ese panorama, se le sumó un nuevo alerta: la caída de una torre grúa en Buenos Aires que ocasionó serios destrozos. Casi de manera inmediata, vecinos de Paraná se sumaron a los reclamos, sobre todo, porque en la ciudad hay dos estructuras similares que operan diariamente. Al respecto, el concejal Horacio Piceda anticipó que con el reinicio de la actividad en el Concejo Deliberante (el próximo 1 de marzo) se intentará avanzar sobre una iniciativa que procura regular ese tipo de grúas en la construcción de torres. En ese sentido, el edil indicó que el borrador del proyecto está “bastante” avanzado, por lo que estimó que a mediados del mes que viene estará concluido para darle ingreso. En principio, adelantó que el primer artículo establecerá la aprobación de los requisitos para la instalación y puesta en servicio de las torre grúas, para obras u otras aplicaciones, conforme a la reglamentación. En tanto, los usuarios de esos aparatos de elevación tendrán que acreditar el manual del fabricante, las instrucciones del usuario, la certificación de control y de empresas. Antecedentes Si bien en la Argentina no hay una abultada legislación municipal al respecto, Piceda destacó que en España existe una larga tradición de esas maquinarias, por lo que hizo hincapié en que sobre la base de ayuntamientos donde tengan normas al respecto elaborará una adaptación para que las empresas locales cumplan con los requisitos y, por su parte, el municipio ejerza el rol de policía, exigiendo las medidas precautorias. Características La torre grúa es una máquina empleada para la elevación de cargas, por medio de un gancho suspendido de un cable, y su transporte, en un radio de varios metros, a todos los niveles y en todas direcciones. Está constituida esencialmente por una torre metálica, con un brazo horizontal giratorio, y los motores de orientación, elevación y distribución o traslación de la carga, disponiendo además un motor de traslación de la grúa cuando se encuentra dispuesta sobre carriles. Puede empotrarse en el suelo, inmovilizada sin ruedas o bien desplazable sobre vías rectas o curvas. En Paraná, hay dos de esas estructuras. Tienen 40 metros de altura, son de marca Jaso, de construcción española y fueron adquiridas en Buenos Aires por la empresa constructora local Gini SRL. Ese tipo de tecnología se utiliza por primera vez en nuestra ciudad –se recuerda un antecedente similar pero de menor cuantía en la construcción de Los Altos de Ituzaingó- y es idéntica a la que se está empleando en la construcción de las imponentes torres que se levantan en Puerto Madero, Capital Federal, ya que modifican la ecuación técnica y económica de la construcción moderna. Se trata de un tótem de 150 mil dólares de costo, pero que permite optimizar en un 25 % los recursos económicos y el tiempo de construcción; al tiempo que los empresarios del sector subrayan que más importante que la rapidez y el ahorro que generan, permiten proteger y mejorar las condiciones laborales de los empleados. Según advierten, esa es la forma más moderna y segura para trabajar, ya que sustituye las peligrosas escaleras y andamios que poseen los métodos tradicionales, y esa tecnología modifica el tipo de montaje de una estructura en altura, el diseño del trabajo, los motores y las normas de seguridad, en síntesis: un cambio cualitativo en la forma de trabajar. (Fuente: El Diario)