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e la redacción de INFORME DIGITAL Luego de que máquinas viales, contratadas por la empresa que construirá el nuevo Shopping de Paraná, ingresaran al predio del Hipódromo para comenzar las obras, se encendió la alarma de aquellos que no quieren abandonar aun el lugar y de quienes ya acordaron retirarse. En el lugar residen 50 familias, 6 de las cuales no están ligadas a la actividad equina y al trasladarse el Hipódromo a Oro Verde, quedarían sin un lugar para vivir, por ellas la Defensoría del Pueblo tomó cartas en el asunto. Según contó a radio f5 el titular de la repartición, Luís Garay, “las seis familias con las que trabajamos, asesorándolos y haciendo de intermediarios con la empresa, son las que no tienen ningún vínculo con esta empresa, el Jockey Club, ni con dueños de caballos de carrera, son personas que viven en el lugar hace unos 20 años”. “Logramos que la empresa que adquirió el predio del Hipódromo, comprara cuatro terrenos en San Benito y les construyera viviendas prefabricadas en 90 días, incluso estarán escrituradas a su nombre. Y a las otras dos personas que tienen terrenos en Colonia Avellaneda y Paraná, les darán los materiales”, destacó. “En el Hipódromo vive más gente pero son empleados del Jockey Club o de propietarios de caballos, gente con la que no tomamos ninguna intervención”, pero Garay agregó que “no tenemos ningún problema en acercar a las partes, pero por ahora lo vemos de afuera”. En este caso, las familias que no quieren irse del lugar, reclaman que se termine totalmente el predio de Oro Verde, para continuar con sus actividades normalmente. Hasta que esto no se cumpla, no se irán.